(Foto: José R. Montero)

Prosiguiendo con el recorrido por los interiores del Mein Schiff 3 hoy lo retomaremos en el punto donde lo dejamos en el post anterior, la cubierta 5, así que subiremos una cubierta y empezaremos desde allí. Realmente pasaremos bastante rápido por las siguientes cubiertas porque desde la 6 y hasta la 11 lo único que aparecen en ellas son los camarotes de la nave por lo que comentaré algo sobre los alojamientos que nos podemos encontrar a bordo de este sensacional barco.

Un sinfín de variados alojamientos a bordo del Mein Schiff 3.

Como ya comenté en la entrada dedicada a la escala del Mein Schiff 3 en A Coruña uno de los rasgos más destacados de la nave hace referencia a sus camarotes y es que el 80% de los mismos tienen balcón privado, una cifra pocas veces vista para un buque de un tamaño similar a éste. La elección de una cabina en donde alojarnos se presenta complicada ya que existen un total de 23 opciones diferentes que van desde los simples camarotes interiores, muy acogedores y bien equipados (incluso con una cafetera de cápsulas) con un tamaño de unos 17 metros cuadrados, hasta las más exclusivas Kapitan Suites, situadas a proa de la cubierta 10 y que cuentan con un espacio de 54 metros cuadrados más una terraza de 15 metros cuadrados con hamaca y tumbonas. Además los pasajeros de estas suites gozan de ciertos privilegios como mayordomo propio, acceso exclusivo a determinadas instalaciones de la nave y prioridad en restaurantes, excursiones en tierra y organización de celebraciones personales.

Las flechas verdes señalan la ubicación exacta de las Kapitan suites; son dos
 y se encuentran una en cada costado justo por detrás del puente de mando.

Mención aparte merecen las Himmel & Meer Suites («cielo y mar»). Son 10 suites situadas en la cubierta 14 siendo las únicas que se encuentran más allá del piso 11 y que tienen acceso exclusivo al spa del Mein Schiff 3. En esencia son muy parecidas a las Kapitan Suites, presentando los mismos servicios aunque un tamaño algo menor («sólo» tienen 40 metros cuadrados) pero la principal diferencia radica en que son tipo dúplex y que su terraza se extiende más de 30 metros cuadrados y cuenta con ambientes separados por si queremos tomar el sol o gozar de un ambiente tipo lounge. Las categorías inferiores de camarotes, si bien son más pequeñas y no tienen los privilegios de las mejores suites no desmerecen en absoluto gracias a su moderna decoración y destacan por su modularidad ya que como opción TUI Cruises permite eliminar la separación entre balcones cuando reservamos dos o más camarotes adyacentes para crear así una única terraza.

Recreación de una de las Himmel & Meer suites.
(Fuente: Tuicruises.com)



 Es hora de volver a las estancias públicas del Mein Schiff 3 y para ello subimos un nivel y entramos en la cubierta 12 o Aqua deck. El nombre ya indica a las claras que es aquí donde encontraremos las piscinas del barco, dos en concreto, y que se sitúan en la parte central de la nave; por un lado la principal, que con una longitud de 25 metros y dos jacuzzis situados a los lados goza de un buen espacio para tomar el sol en una tumbona pero si el astro rey decide no aparecer o la temperatura no es la más idónea tampoco tenemos que renunciar al baño…

Piscina principal.
(Foto: José R. Montero)

… porque justo por detrás de la piscina principal el Mein Schiff 3 incorpora una gran piscina cubierta con otros dos jacuzzis que nos permitirá disfrutar de un agradable baño sea cual sea la climatología.

La piscina cubierta.
(Foto: José R. Montero)

Si el chapuzón nos ha abierto el apetito no nos hará falta ni coger un ascensor porque en esta misma cubierta y si nos dirigimos a popa encontramos dos interesantísimas opciones para saciar el hambre; en primer lugar Anckelmannsplatz, un enorme restaurante tipo buffet ideal para picar algo durante todo el día con un gran surtido de propuestas desde las especialidades germanas hasta la cocina más internacional. La segunda propuesta está especialmente indicada para los amantes del pescado y es el GOSCH Sylt, situado a popa del anterior y con capacidad para 130 comensales. Ambas opciones de restauración entran dentro del todo incluído.

Arriba: El Anckelmannsplatz, un enorme buffet ideal para comer a cualquier hora del día
Abajo: Si lo nuestro es degustar un buen plato de pescado con unas magníficas vistas, GOSCH Sylt es el lugar ideal.
(Fotos: José R. Montero)

Si lo que nos apetece es descansar pero lejos del bullicio de la zona de piscinas, a proa de la cubierta 12 entraremos en un auténtico oasis de paz llamado Himmel & Meer Lounge donde podremos tomar un cóctel observando la inmensidad del mar que se abre ante nosotros o un impresionante cielo estrellado por la noche.

Una habitación con vistas: El Himmel & Meer Lounge.
(Foto: José R. Montero)

Con la mente relajada es hora de ocuparse del cuerpo y sin movernos de la proa nos encontramos con dos opciones antagónicas; una sesión en el Sport & Gesundheit, el gimnasio del Mein Schiff 3 (a proa y a babor) equipado con las máquinas más modernas para correr, hacer bicicleta, etc, o un relajante masaje y una sesión de sauna en el Spa & Meer (a proa y a estribor). Como ven las opciones son de lo más variado.

Arriba: En el gimnasio del Mein Schiff 3 podemos tonificar el cuerpo mientras gozamos de unas vistas inigualables.
Abajo: La recepción del Spa & Meer.

(Fotos: José R. Montero)

Ya en la cubierta 14, u Horizont deck, el protagonismo es para los deportes gracias a la pista para practicar fútbol, baloncesto o voleibol situada justo detrás de la chimenea y que recibe el nombre de Arena o al anillo de jogging de casi 300 metros. La pista de deportes tiene un uso alternativo y es que gracias a su pequeña grada y a la gran pantalla LED encastrada detrás de la chimenea del barco podremos disfrutar de un gran cine al aire libre por las noches.

Practicar deportes o ver una peli, todo en uno.
(Foto: José R. Montero)


Pero como no sólo de deporte vive el hombre la cubierta 14 también ofrece la posibilidad de disfrutar de una excepcional panorámica con una copa en la mano en el X-Lounge, situado a proa, o tomarse un mojito contemplando la estela que va dejando el barco en su avance en el Aubenalster Bar & Grill. En esta cubierta también encontramos la guardería del Mein Schiff 3 y que recibe el apropiado nombre de Nest.
 

Nest es la guardería del buque.
(Foto: José R. Montero)

Por último y coronando el barco la cubierta 15 o Brise deck que en realidad no es una cubierta completa sino que cuenta con varios espacios que funcionan como solana gracias a sus decenas de tumbonas disponibles, con la parte de proa reservada para los pasajeros de las suites y las junior suites.



La cubierta 15 es también una impresionante atalaya desde donde observar el paisaje. 
Un simpático suricata rosa nos hará compañía mientras miramos a través de los primáticos.
(Foto: José R. Montero)

Ya ven que lo difícil a bordo del Mein Schiff 3 es no encontrar la opción perfecta. Aquí en las alturas de la cubierta 15 y con unas vistas impresionantes dejamos este tour por uno de los buques de cruceros más fascinantes de la industria y el más moderno de toda la flota mundial que es tanto o más espectacular por dentro que por fuera. Difícil definir con palabras todo lo que este coloso de los mares nos ofrece así que teniendo en cuentas que está diseñado por y para alemanes lo resumiremos diciendo…¡Wunderbar!


Para acabar quisiera dar las gracias a mi gran amigo José R. Montero por permitirme usar sus magníficas fotos de su visita al Mein Schiff 3 para realizar este reportaje especial de dos entradas sobre lo que este sensacional navío esconde en su interior. Gracias a él hemos podido experimentar, al menos en parte, las sensaciones que el mismo vivió en sus carnes al pasear por los salones, miradores y demás estancias de este brillante prodigio naval y sentirse por unas horas como un pasajero más del Mein Schiff 3. ¡Mil gracias, Jose!.


Desde la cubierta 15 del Mein Schiff 3 las vistas de A Coruña eran impresionantes.
(Foto: José R. Montero)