El Mein Schiff 2 se ha convertido esta semana en el primer buque de cruceros de gran tamaño en reanudar sus rutas desde el parón del sector por culpa de la pandemia de COVID-19. Se trata sin lugar a dudas de un minúsculo punto de luz al final de un larguísimo tunel.
Se trata, eso sí, de un crucero atípico. El buque de la alemana TUI Cruises zarpó el pasado viernes en su primer «crucero azul»; el nombre define bastante bien a este itinerario ya que la travesía no tendrá escalas. Los pasajeros embarcaron en Hamburgo y desembarcarán en la misma ciudad germana 4 días después. Sin poder bajar a tierra los cruceristas tendrán que conformarse con gozar de los increibles paisajes de la costa noruega a distancia.
Precisamente los pasajeros son otra de las novedades en el regreso a la actividad del Mein Schiff 2. A bordo del espectacular buque de TUI viajan estos días tan sólo 1.200 huéspedes, un aforo limitado al 40% de su capacidad habitual para asegurar de esta manera el distanciamiento social a bordo de la nave.
Los planes de TUI Cruises
Este viaje del Mein Schiff 2 es sólo el primer paso en el regreso a la actividad de la naviera TUI Cruises después de cinco meses de inactividad. Tras una fase inicial de cruceros cortos, a principios de agosto se sumarán los buques Mein Schiff 1 y Mein Schiff 4 para realizar cruceros de 11 días a Noruega y de 8 días por el Báltico respectivamente. El Mein Schiff 6 se incorporará más adelante. En total TUI Cruises tiene previstos un total de 13 cruceros en su regreso a los mares.
En palabras de Sebastian Ebel, miembro del consejo ejecutivo de TUI Group, «la demanda es alta, las tarifas de reserva son positivas y muchos clientes quieren pasar sus vacaciones en un crucero”.
Al regreso de TUI Cruises se le sumarán en los próximos días el de otras compañías. Aida Cruises será la próxima naviera de grandes buques en reanudar sus operaciones, un regreso previsto para principios de agosto cuando tres de sus barcos zarparán desde varios puertos germanos.
