El pasado domingo 29 de mayo el buque Prinsendam puso el broche final al mes crucerístico por excelencia en A Coruña, un mes que si bien este año no ha marcado registros históricos nos ha dejado un total de 9 escalas, algunas de ellas protagonizadas por naves inéditas en nuestra costa.
Ese no es el caso del Prinsendam, cuya estampa es ya todo un clásico en nuestra ciudad y es que se trata, junto al Black Watch de Fred. Olsen Cruise Line, del crucero con más visitas realizadas en A Coruña.
El buque de la naviera Holland-America Line llegó hacia las 07:00 horas procedente de Oporto y permaneció en la dársena coruñesa por espacio de unas nueve horas hasta que a las 17:00 soltó amarras y puso rumbo a su siguiente destino, la ciudad francesa de Burdeos.

Tengo que admitir que, si bien el Prinsendam cumplió escrupulosamente los horarios marcados yo no anduve muy fino ese día ya que decidí centrarme en una de las dos maniobras y digamos que aposté al caballo equivocado.
La elección me salió rana puesto que preferí centrar mis esfuerzos en la salida y evitar así el madrugón (que quereís, la pereza me puede a veces). El resultado fue que tras una mañana veraniega con un calor impresionante las nubes empezaron a ganar terreno para dar paso a una tormenta con abundante aparato eléctrico que chafó en parte el trabajo fotográfico realizado desde Mera. Como me da rabia no hacer una pequeña reseña de la visita de cada uno de los cruceros que nos visitan incluyo algo de lo poco que pude salvar de la sesión de fotos. La próxima vez que vuelva el Prinsendam trataré de afinar más. Palabra de shipspotter.