Estaba cantado. El accidente sufrido hace unas semanas por parte del Costa Allegra en mitad del Océano Indico ha supuesto la sentencia para este navío, que será vendido para desguace según acaba de confirmar mediante una nota oficial la naviera propietaria del buque, Costa Cruceros.
Tras llegar a las Islas Seychelles y poner fin a la pesadilla de tres dias vivida por los 927 pasajeros que iban a bordo del Costa Allegra cuando un incendio provocó que el veterano navío quedase a la deriva en mitad del Indico, la compañía se puso rapidamente manos a la obra para cuantificar los daños y pronto se dio cuenta de que la factura saldría cara. Tan cara que han decidido que su coste no es asumible y que no merece la pena reparar la maltrecha maquinaria del viejo Allegra. La solución será como tantas otras veces un trágico final a golpe de soplete.
Oficialmente la causa son los elevados costes de reparación de la nave pero posiblemente el problema sea mayor que ese; el Costa Allegra es más un problema de imagen que económico en este momento tan delicado que atraviesa la naviera italiana, que no levanta cabeza desde el naufragio del Costa Concordia hace ahora dos meses por lo que han optado por la solución más radical. De todas maneras no es que la venta del Costa Allegra sea una sorpresa completa. Se trata, de lejos, del barco más antiguo de la flota Costa y también del más pequeño, ya su cuasigemelo Costa Marina fue vendido a finales del pasado año a la naviera asiática Harmony Cruises con lo que estaba claro que la venta del Allegra era cuestión de tiempo. El accidente de hace unos días simplemente ha servido para acelerar el desenlace.
a A Coruña en julio de 2011 unos meses antes de ser vendido a la naviera
Harmony Cruises.
El Costa Allegra fue botado originalmente como un portacontenedores en el año 1969 bajo el nombre de Annie Johnson y pasados unos años una compañía compró a éste y a uno de sus gemelos (el posterior Costa Marina) para reconstruirlos como barcos de pasaje. El proyecto quedó paralizado y ambas naves permanecieron amarradas durante varios meses hasta que a principios de los 90 Costa Cruceros retomó el proyecto que concluyó a finales de 1992 con la puesta en servicio de un buque totalmente nuevo, el Costa Allegra (aunque inicialmente su nombre iba a ser Costa Azzurra) construido sobre la base de un portacontenedores con más de 20 años de vida.
Con la venta del Allegra para desguace y la salida de la compañía hace unos meses del Costa Marina se pone el punto y final a toda una época dentro de la naviera transalpina.
A pesar de lo rápido que se ha tomado la decisión está claro que no ha tenido que ser nada fácil para Costa llevarla a cabo puesto que supone un nuevo quebradero de cabeza el tener que reordenar todas las rutas comprometidas para este año; no olvidemos que, en poco más de 50 días su flota se ha visto mermada en dos unidades de manera que andan haciendo verdaderos malabares para reubicar a todos aquellos pasajeros que tenian contratado algún crucero con la compañía. Tras el desastre del Costa Concordia, Costa Cruceros ha cubierto la ruta realizada por el buque siniestrado con el recién remodelado Costa Neoromantica hasta el mes de mayo y a partir de entonces con el Costa Mágica, una solución un poco improvisada y que no palia del todo las necesidades de los pasajeros afectados puesto que estas dos naves no alcanzan el tamaño del barco siniestrado.
En el caso del Costa Allegra a Costa ya no le quedaban más conejos en la chistera y no le ha quedado más remedio que cancelar rutas. El sustituto en la que realizada por el Allegra será el Costa Voyager (que está charteado por Iberocruceros desde que el Costa Marina dejó la compañía) y la travesía que éste barco realizaba por el Mar Rojo ha sido cancelada durante este año 2012.
Siempre es triste decir adiós a alguno de estos navíos que tantos buenos momentos nos han proporcionado a shipspotters y aficionados a los barcos en general pero la realidad es que los negocios no entienden de sentimentalismos, sólo de cifras, y las cifras una vez más han vuelto a dictar sentencia. Adiós a otro clásico de los mares. Adiós Costa Allegra. Siento que no hayas tenido un final más alegre…
