(Foto: José R. Montero)

El pasado domingo el puerto de A Coruña recibió una nueva visita de un buque de cruceros, si bien en esta ocasión la escala fue más breve de lo que suele ser habitual para este tipo de navíos. El protagonista fue el Sea Adventurer, que sobre las 9 de la noche llegaba a la ciudad herculina procedente de Vilagarcía para recoger a parte de su pasaje, compuesto por poco más de 100 personas y que a primera hora de la mañana había desembarcado en la localidad arousana para realizar las oportunas excursiones contratadas. Tras esta corta parada técnica de apenas una hora el Sea Adventurer zarpó poco antes de las diez y media de la noche rumbo a su siguiente destino, el puerto galo de Le Verdon.

(Foto: José R. Montero)

Construído con el nombre de Alla Tarasova en el año 1975 en los astilleros Brodogradiliste Kraljevica de la ciudad de Rijeka, en la antigua Yugoslavia (actualmente Croacia), el Sea Adventurer  es un pequeño buque de expedición con capacidad para navegar entre hielos de 4.376 toneladas de registro bruto y cuyas medidas principales son 100´6 metros de eslora, 16´3 metros de manga y un calado de 4´7 metros. El navío tiene capacidad para un total de 122 pasajeros a los que hay que sumar su tripulación formada por 72 personas. Su velocidad de servicio es de 12 nudos.

(Foto: José R. Montero)

El Sea Adventurer es propiedad de International Shipping Partners (ISP) y de su explotación comercial se encarga la norteamericana Quark Expeditions, que ofrece viajes a bordo de este veterano aventurero por las regiones más inhóspitas del globo.

(Foto: José R. Montero)

Agradecimientos a mi amigo José R. Montero por sus estupendas fotos que ilustran la entrada de hoy.