(Foto: José R. Montero)

A pesar de encontrarnos a finales de octubre las escalas de cruceros se suceden con una sorprendente frecuencia en el puerto herculino. Esta semana han sido tres los buques de pasaje que se han acercado por unas horas a la rada herculina; tras las visitas de Aurora y Britannia (a los que dedicaré conjuntamente y en los próximos días su espacio en el blog) el jueves fue el turno del buque Saga Sapphire.
 

El Saga Sapphire  de nuevo en A Coruña.
(Foto: José R. Montero)

Procedente de Arrecife, capital de la isla canaria de Lanzarote, el Saga Sapphire hizo madrugar a aquellos que no quisieron perderse su maniobra de atraque; a eso de las 07:30 horas tomaba práctico y apenas 45 minutos después  amarraba en el habitual muelle de trasatlánticos tras un giro de 180 grados a la altura del muelle de petroleros. A bordo del buque de la naviera británica Saga Cruises llegaron en esta ocasión a la ciudad unos 700 pasajeros.

Saga Cruises es toda una habitual desde hace años en la rada herculina.
(Foto: José R. Montero)




A Coruña fue la última parada en el itinerario que estos días se encontraba realizando el Saga Sapphire, un crucero de 12 días de duración iniciado el pasado día 16 en el puerto de Southampton y que hasta su llegada a nuestra ciudad había efectuado escalas en Funchal, Santa Cruz de La Palma, Gran Canaria y la mencionada Arrecife. La singladura concluyó a primera hora de hoy en el mismo puerto donde se inició.

(Foto: José R. Montero)

La industria crucerística vive en la actualidad el momento de mayor apogeo de su historia y como consecuencia de ello las navieras se encuentran inmersas en una feroz batalla por ofrecer el producto más atractivo para sus futuros clientes. Ello incluye la construcción de nuevos y espectaculares navíos que incluyan novedosas y sorprendentes instalaciones a bordo que muchos jamás creeríamos que se pudieran llegar a ver nunca en alta mar. El concepto de crucero en sí también se renueva, en muchos casos especializándose en algún aspecto concreto. En ocasiones las navieras buscan atraer un target de cliente muy preciso diseñando cruceros específicos para ciertos colectivos (singles, LGTB, etc…). Para los que buscan mantener su clientela habitual pero quieren ofrecerles un producto original otra opción es la de ofrecer itinerarios cuya temática gire alrededor de un aspecto en concreto. Aquí un crucero gastronómico sería el típico ejemplo.

El Celebrity Silhouette debutaba hace unas semanas en la ciudad herculina con motivo de un crucero dedicado en excluxiva al colectivo gay.

Y en esto de los cruceros temáticos una de las compañías de referencia es precisamente Saga Cruises, la propietaria de nuestro protagonista de hoy. Desde hace años la compañía de Folkestone ofrece a sus clientes una interesante iniciativa que alcanza un gran éxito temporada tras temporada; se trata del «Cruise of mistery», el crucero del misterio. El «Crucero del
Misterio» consiste en una singladura en la cual los pasajeros no conocen
más datos que la duración del viaje y los puertos de salida y llegada,
permaneciendo en secreto tanto el itinerario como las escalas del mismo. Es una experiencia similar a la realizada por otra naviera dedicada al mercado británico, Fred. Olsen Cruise Lines; de hecho uno de sus navíos, el Black Watch, partirá el martes (durante la noche de Halloween) desde el puerto de Harwich en uno de estos viajes misteriosos. No descarten que lo veamos por el golfo ártabro la próxima semana, ¿quizá por Ferrol? (chssss!. Es un secreto…).

El Black Watch, al que podemos ver en esta foto zarpando de Ferrol, inicia esta semana un crucero del misterio, en el que los pasajeros desconocen la travesía que van a realizar.
(Foto: José R. Montero)

Relacionado con el asunto de los cruceros temáticos Saga Cruises realizará el próximo año otra interesante iniciativa y se llevará a cabo precisamente a bordo de nuestro protagonista de hoy, el Saga Sapphire: se trata del crucero del arte. El crucero partirá el próximo 23 de febrero desde el puerto de Southampton para visitar durante tres semanas y a lo largo del Atlántico y del Mediterráneo occidental un total de 9 destinos de marcado carácter cultural. Serán además estancias de mayor duración a las habituales realizadas por el Saga Sapphire que incluirán en algunos casos pernoctaciones en el puerto de escala, todo ello para que el crucerista se empape bien del legado cultural de cada zona. La travesía concluirá el 15 de marzo en el mismo puerto de salida y los precios para la misma partirán desde los 3.200 euros.





El Saga Sapphire realizará en febrero del próximo año un crucero muy «artístico».
(Foto: José R. Montero)

Así aquellos que decidan tomar parte de este crucero del arte harán escala en lugares como Bilbao, con su emblemático museo Guggenheim, Málaga, cuna del gran Pablo Picasso o la Barcelona de Gaudí. El itinerario también incluirá una parada en el pequeño puerto de Palamós para desplazarse hasta Figueres, lugar de nacimiento de Salvador Dalí. Ya en territorio francés la escala en Toulón permitirá a los cruceristas visitar una de las mecas del impresioinismo con el estudio de Cezánne como muestra más significativa. Otro de los alicientes del viaje será la recalada en Livorno, puerto utilizado por los buques de cruceros para que su pasaje pueda visitar la ciudad de Florencia, un museo al aire libre como existen pocos en el mundo. Como véis se trata de un completo recorrido en el que tendrán cabida toda clase de expresiones y corrientes artísticas.

En un crucero en el que todo gira alrededor del arte no podía faltar la escala en Bilbao para visitar su icónico Museo Guggenheim.

Volviendo al pasado jueves el Saga Sapphire y sus pasajeros se despidieron de los coruñeses minutos después de las séis de la tarde cuando el navío inició su maniobra de salida y puso rumbo a la ciudad de Southampton. La despedida del buque de bandera maltesa no es ni mucho menos que definitiva ya que el Sapphire regresará a nuestra ciudad en dos ocasiones más antes de finalizar el año, estando la próxima de sus escalas fijada para el 11 de noviembre.

Rumbo a tierras inglesas.
(Foto: José R. Montero)

 Agradecimientos a mi buen amigo y habitual colaborador del blog, José R. Montero, que es el autor de la mayor parte de las estupendas fotos que ilustran el post de hoy.