Pese a que hace unas semanas el CEO del grupo Royal Caribbean, Richard Fain, afirmase que no habría venta de los buques de su flota, la realidad como todos sabíamos es muy distinta. Hoy hemos conocido que el Empress of the Seas se dirige en estos momentos rumbo al desguace.
No hay confirmación oficial de momento pero el viaje final ya ha comenzado. El Empress of the Seas zarpó en el día de ayer desde el fondeadero de Poole, frente a la costa de Bournemouth, y navega en estos momentos rumbo a Marsaxlokk. Todo indica que, al igual que hicieran los buques Monarch y Sovereign de Pullmantur, el puerto maltés será donde el Empress OTS sea despojado de equipos electrónicos y todos los objetos de valor antes de poner proa hacia su destino final, el desguace de Aliaga (Turquía). El AIS del buque de bandera bahameña indica como fecha de llegada a Marsaxlokk el 9 de agosto.
El Empress of the Seas se sumará de esta manera a la larga lista de buques que terminarán sus días en el desguazadero otomano. Allí se encuentran ya varados los mencionados Monarch y Sovereign además del Carnival Fantasy, que arribó esta semana. De camino está el gemelo de este último, el Carnival Inspiration, mientras que el Horizon zarpará en breve hacia allí desde el Pireo, donde se encuentra en proceso de desmantelamiento de equipos.
El más viejo de la flota Royal Caribbean
El Empress of the Seas es el buque más pequeño y antiguo de los 26 que actualmente forman la flota de Royal Caribbean. Fue construido en los astilleros Chantiers de l´Atlantique de Saint Nazaire (Francia) y puesto en servicio en 1990 con el nombre de Nordic Empress. Se trata de un buque de 48.563 T.R.B. y 4.978 T.P.M. de 211 metros de eslora y 30´7 metros de manga con capacidad para 1.840 pasajeros.
El buque operó para la naviera Pullmantur Cruises, subsidiaria de Royal Caribbean, entre 2008 y 2016 bajo el nombre de Empress. En mayo de 2016 volvió a la compañía matriz y recuperó su antiguo nombre ofreciendo desde entonces cruceros de corta duración por aguas del Caribe.
