Tras un frenético inicio de mes, con la recalada de 4 buques de crucero en apenas 7 días, el flujo de naves de pasaje, lejos de ralentizarse, continuará aumentando en las próximas semanas. Por lo pronto el pasado martes día 9 tuvo lugar la quinta escala de abril con la visita del buque Oceana de la naviera británica P&O Cruises. Se trata de un viejo conocido de la dársena coruñesa que llegó sobre las 08:30 horas procedente del puerto de Leixoes en la que supone su primera de las muchas visitas del año a nuestro puerto ya que en 2013 este navío será uno de los principales protagonistas en la urbe herculina con un total de 11 escalas previstas.

Esas 11 recaladas lo convierten en el buque de pasaje que más veces se dejará ver el presente año amarrado en el muelle de transatlánticos, tomando el testigo del Independence of the Seas que en las dos anteriores campañas le ostentó este honorífico título pero que en la presente ha reducido drasticamente su presencia en nuestro puerto. En 2010 el más repetidor fue el Balmoral con 4 visitas. Acostumbrados como estamos a echar un vistazo al muelle de trasatlánticos y ver a un barco de cruceros atracado dia si y día también no hay que olvidar que hace no tanto tiempo la presencia de este tipo de tráficos en la ciudad era todo un acontecimiento y hablar de que una misma nave pudiera hacer una decena de escalas o más en un mismo año una simple utopía. Que esto se haya convertido en una realidad no es fruto de la casualidad; por detrás hay un gran trabajo ejercido desde multitud de instituciones y empresas que han visto como la apuesta en firme por este sector ha dado sus frutos convirtiendo en una referencia nacional a nuestra ciudad desde hace unos años.

(Foto: Manuel Candal)

Vaya por delante que la expresión que da título a la entrada no tiene ningún carácter peyorativo. Todo lo contrario; es una gratísima noticia que un buque de las características del Oceana realice tantas escalas en el puerto de A Coruña en un mismo año y lo es por varios motivos.

David contra Goliath a la altura de A Marola.

Por un lado el enorme impacto económico que supone el atraque de un barco como éste, con capacidad para 1.950 personas, o lo que es lo mismo 1.950 potenciales fuentes de ingreso dispuestas a dejar algún euro en la ciudad y sus alrededores. Si multiplicamos la cifra por el número de escalas que el navío tiene previsto realizar en 2013 tenemos que sólo el Oceana desembarcará en A Coruña a unos 21.500 pasajeros, cifra que por sí sola supera al total de desembarcados en muchos puertos españoles (por poner un ejemplo en el puerto de Santander se espera recibir de este tipo de tráficos a 20.000 pasajeros este año). Y no nos olvidemos de que a bordo del Oceana viaja más gente; la nave tiene una dotación formada por 850 personas que durante las escalas también pisan tierra para tomarse un descanso (y por que no, hacer alguna compra). Pero los ingresos no vienen sólo de la gente que va a bordo del buque; las navieras pagan unas tasas portuarias en cada dársena donde hacen escalas sus barcos correspondientes al uso de sus instalaciones, la retirada de residuos, los gastos de practicaje, etc, y que no dejan de ser importantes beneficios a nivel local. Muchas de esas tasas van en proporción al tamaño del buque (de su desplazamiento) así que 11 escalas de un gigante como el Oceana, con sus 77.499 toneladas de registro, suponen un buen pellizco para las arcas coruñesas.

El pesquero Nuevo Mugardos rodea al Oceana durante la maniobra de atraque 
del navío inglés.

Si bien los beneficios no son sólo económicos. Que un navío como éste haga escala con tanta asiduidad también tiene ventajas a otros niveles; les hablo del prestigio que otorga a un puerto el que una naviera tan importante como la P&O deposite toda su confianza en el uso de sus instalaciones, y es que no hay que olvidar que estamos ante una de las grandes navieras que surcan los mares con una historia que se remonta al año 1837.

Y por que no decirlo también tiene importancia a un nivel más lúdico y es el que le otorga a todos aquellos aficionados a los barcos (entre los que me incluyo) que disfrutan viendo las maniobras de estos colosos flotantes en aguas de la bahía, todo un placer tratándose de una nave de este calibre a la que yo particularmente le tengo especial cariño. En este aspecto podría decir en mi nombre, y creo que en el de la mayoría de shipspotters, que el Oceana es y será siempre bienvenido ya sea 11 o 1000 veces.

(Foto: Manuel Candal)

De momento el Oceana cerró su primera escala de 2013 a las 17:00 horas cuando tras soltar amarras puso proa al norte para dirigirse al puerto de Southampton. El próximo día 25 de este mes tendrá lugar el segundo capítulo del particular idilio entre este navío inglés y la ciudad coruñesa; será con un invitado muy especial y que compartirá amarre por unas horas con el Oceana: El buque alemán Deutschland.

Por último quisiera darle las gracias a Manuel Candal por facilitarme fotos de la entrada y sobre todo de la salida del Oceana, maniobra esta última a la que no pude acudir pero que espero poder disfrutar en las siguientes escalas.

(Foto: Manuel Candal)