La jornada del pasado viernes supuso el estreno en aguas heculinas de un nuevo gigante de los mares, en este caso el colosal MSC Fantasia, uno de los buques de cruceros más grandes que visitarán la ciudad este año.
Bien temprano decidió la nave de MSC Cruceros inscribir su nombre por primera vez en el libro de registros del puerto herculino y a eso de las séis de la mañana maniobraba ya en las proximidades del Castillo de San Antón para atracar dando atrás en el muelle de trasatlánticos. A bordo los casi 3.300 pasajeros que trajo a la ciudad el navío de bandera panañema pero de corazón italiano se preparaban para afrontar la jornada que les llevaría a descubrir los principales puntos de interés de la ciudad y alrededores, con Santiago de Compostela una vez más como destino estrella.
Todos los billetes vendidos tenía la travesía que estos días realiza el MSC Fantasia y que lo trajo la pasada semana hasta tierras gallegas. El crucero de 12 noches de duración se inició el pasado 17 de septiembre en Copenhague y hasta su llegada a nuestra ciudad había hecho paradas en Zeebrugge (el puerto de Brujas) y Southampton, puerto de procedencia de la nave a su llegada a aguas de Marineda. Tras disfrutar de las bondades de A Coruña los cruceristas visitarán Lisboa, Málaga, Palma, Barcelona y Marsella antes de concluír la singladura en el puerto de Génova el próximo viernes. MSC ofrecía a sus clientes la posibilidad de iniciar el crucero un día antes zarpando desde Kiel (Alemania).
Construído en los astilleros STX France de la ciudad gala de Saint Nazaire y puesto en servicio en diciembre de 2008, el MSC Fantasia es un colosal buque de 137.936 toneladas, un dato que lo hace entrar en el top 25 del ranking de buques de cruceros más grandes del mundo (ocupa el puesto 24º). Sus dimensiones principales son 333´3 metros de eslora, 37´9 metros de manga y un calado de 8´65 metros. La capacidad de pasaje del Fantasia es de 3.274 pàsajeros en acomodación normal gracias a sus 1.637 camarotes repartidos a lo largo y ancho de las 13 cubiertas que dedica en exclusiva al pasaje (a mayores la nave tiene 4 cubiertas más). Del total de camarotes 1.260, o lo que es lo mismo, el 77% tienen terraza privada.
En el apartado mecánico el MSC Fantasia presenta la habitual propulsión diésel eléctrica con 5 motores diésel Wärtsila (2 de 16 cilindros y otros 3 de 12 cilindros) y 2 motores eléctricos Converteam que producen 40.000 KW y son los encargados de «darle vida» a dos hélices de cinco palas cada una manufacturadas también por Wärtsila, que impulsan a esta fantasia flotante hasta los 24 nudos de velocidad máxima.
El MSC Fantasia fue la primera unidad de una nueva generación de buques de MSC que por este motivo se conoce como Clase Fantasia y con la que la naviera napolitana MSC Cruises entró en la «liga de los grandes» al contar por primera vez con barcos que superaban las 100.000 toneladas. La serie la integran 4 navíos: además de nuestro protagonista de hoy el también visto por nuestras aguas MSC Splendida (2009), el MSC Divina (2012) y el MSC Preziosa (2013), siendo las dos últimas unidades ligeramente mayores que sus dos predecesoras. Decir además que el encargado de cerrar la saga, el MSC Preziosa, también debutará dentro de unas semanas en nuestra ciudad.
La aparición del MSC Fantasia en 2008 supuso un importante punto de inflexión no sólo para su naviera sino también en el contexto de la industria del crucero: se trataba en su día del mayor buque de pasaje construído para una naviera europea pero además de por su espectacular tamaño el nuevo navío insignia de MSC destacaba por presentar una serie de primicias realmente destacadas. Con el objetivo de captar una clientela hasta ese momento fuera de su alcance (no olvidemos que MSC entra dentro del rango de las compañías generalistas) la naviera italiana introdujo en el MSC Fantasia por primera vez el concepto MSC Yacht Club, que explicado en palabras de la naviera transalpina significaba la inclusión de un barco dentro de otro barco. Basicamente consiste en actualizar el concepto de «clases» existente en los liners de principios de siglo XX a los tiempos modernos de manera que ciertos pasajeros gozan de una serie de ventajas a bordo en los servicios y en las instalaciones de la nave.
existe porque se considera que este número da la mala suerte según la
superstición italiana) están reservados para los cruceristas pertenecientes a este selecto club que gozan de una serie de privilegios inaccesibles para el resto del pasaje de la nave: cuentan con su propia tipología de camarotes, subdivididos en 3 categorías. También tienen su propia piscina privada, salones exclusivos, y acceso propio mediante ascensor privado a algunas instalaciones comunes de la nave como al MSC Aurea Spa, el impresionante spa del MSC Fantasia. Otros privilegios de los miembros del MSC Yacht Club son la prioridad en el embarque y el desembarque así como a la hora de bajar a tierra para realizar las excursiones y también la reserva prioritaria en bares y restaurantes. El concepto MSC Yacht Club se ha afianzado como una de las señas de identidad de la naviera MSC y sus nuevas generaciones de buques (Meraviglia Class, Seaside Class…) incorporan también estas exclusivas instalaciones.
Pero dejando aparte el novedoso concepto del MSC Yacht Club el MSC Fantasia presentó en su día otras innovaciones, muchas de ellas nunca vistas hasta esa fecha en alta mar. Así el navío incorporó el primer cine interactivo 4-D, en el que las butacas cuentan con un sistena hidráulico propio y efectos de sonido para que el espectador se meta en la acción que está viendo a través de la enorme pantalla. La experiencia 4-D no está incluída en el precio del pasaje y tiene un coste adicional de 6 euros. El Fantasia también incorpora un espectacular simulador de Fórmula 1 con forma de monoplaza que recrea con un enorme realismo la mayoría de los trazados donde se disputa la más famosas de las disciplinas automovilísticas. Y aunque no sea una novedad en sí misma ni tenga otra función más allá de la de comunicar varios niveles, uno de los puntos más destacados de esta palacio flotante es la escalera adornada con miles de cristales de Swarovski situada en el atrio principal de la nave de 5 alturas. Pura fantasía.
(Fuente: MSC Cruises)
Volviendo al pasado viernes y tras una escala de 11 horas el MSC Fantasia reemprendió viaje minutos antes de las 4 de la tarde, momento en el que el megacrucero soltó amarras y tras superar el dique de abrigo aumentó rvoluciones rumbo a su siguiente destino, el puerto de Lisboa. tras la escala que ha significado su debut en A Coruña el MSC Fantasia no tiene previsto realizar más visitas a la ciudad en los próximos meses.
