(Foto: José R. Montero)

Tras la escala del buque Braemar el pasado martes día 7 el tráfico de cruceros se toma un pequeño descanso en la ría herculina por espacio de una semana pero esto no significa que los navíos de pasaje dejen de llegar al golfo ártabro; Ferrol ha tomado el relevo durante este mini-parón en el puerto de A Coruña con dos escalas protagonizadas por los buques Marina y Star Legend, que visitaron la dársena departamental durante las jornadas del jueves y el domingo respectivamente.

El Marina, el primero de los protagonista en aguas ferrolanas.
(Foto: Fernando Allegue)

Minutos antes de las siete y media de la mañana del pasado jueves el precioso Marina se encontraba ya en plena maniobra de atraque en aguas interiores de la ría vecina. Procedente de Leixoes el buque de la naviera Oceania Cruises trajo a la ciudad de Ferrol a unos 1.200 pasajeros, en su gran mayoría norteamericanos, y que estos días realizan una ruta de 8 jornadas de duración con salida desde Lisboa y que tras las paradas en Oporto y la ciudad gallega hará escalas en Bilbao para continuar su periplo por tierras francesas en las dársenas de Le Verdon, Brest y St. Malo antes de poner fin a la travesía en el británico puerto de Southampton.

(Foto: Fernando Allegue)

Pese a que el día no lució muy soleado, los pasajeros se animaron a bajar a tierra para realizar las oportunas excursiones contratadas subiéndose a alguno de los 12 autobuses que llevaron a los turistas a A Coruña, Santiago, Betanzos y Pontedeume. Algunos prefirieron callejear por Ferrol paseando por el barrio de A Magdalena, visitando el Museo de la Construcción Naval o simplemente dando rienda suelta a su afán comprador en alguna tienda. Independientemente de la opción elegida, siempre es una estupenda noticia la llegada de uno de estos buques a la ciudad ferrolana; las arcas locales lo agradecen.

El Marina durante su salida de la ría de Ferrol el pasado jueves con el Castillo de La Palma en primer término.
(Foto: José R. Montero)

El Marina no es un buque desconocido para los ferrolanos ya que debutó en sus muelles el año pasado. Se trata de un barco de reciente factura (inició su andadura comercial en el año 2011) construído en los astilleros italianos Fincantieri Sestri Ponente con un registro bruto de 66.084 toneladas y unas dimensiones pricipales de 239´3 metros de eslora, 32´2 metros de manga y un calado de 7´4 metros que puede albergar a un total de 1.252 pasajeros en alojamiento máximo a los que hay que sumarles sus 800 tripulantes. Para dar cabida a este número de cruceristas el Marina cuenta con un total de 626 camarotes (que practicamente podriamos llamar suites) y el 90% de ellos presenta balcón privado. Su belleza, innegable, reside precisamente en sus dimensiones humanas, alejadas de la gigantización del sector que ha hecho que se pierda cualquier atisbo de forma naval en los nuevos diseños que cuesta distinguir a veces entre un barco o un bloque de apartamentos. El Marina luce una original y «conveniente» bandera ya que navega bajo pabellón de las Islas Marshall, un pequeño archipiélago situado en la micronesia, y su puerto de registro es el de Majuro. Su identificativo de llamada es V7SK2.

Detalle de la preciosa proa del Marina.
(Foto: José R. Montero)

Tras pasar buena parte del día como un ferrolano más, a las cinco y media de la tarde el Marina inició su maniobra de salida que fue seguida desde los principales miradores de la costa por bastantes curiosos pese a ser un día laborable y a que la meteorología no invitaba mucho a la observación. Tras el saludo de rigor por parte de los miembros de la Asociación Batalla de Brión apostados en el castillo de San Felipe a los que el Marina correspondió con varios bocinazos, el buque encaró hacia aguas abiertas para una vez allí poner rumbo a tierras vascas. Tras esta visita el Marina repetirá en el puerto departamental antes de finalizar 2016; será, si no hay cambios de última hora, el próximo 22 de septiembre.

El Marina se despide de Ferrol hasta finales de septiembre.
(Foto: Fernando Allegue)

El Star Legend por su parte no quiso ser tan madrugador y no fue hasta las nueve de la mañana del domingo cuando alcanzó la bocana de la ría. A su encuentro acudió el práctico para llevarlo a su amarre en el muelle Fernández Ladreda. Los 200 pasajeros que llegaron a bordo del buque de la naviera norteamericana Windstar Cruises realizan estos días un viaje de 10 jornadas de duración con salida en Lisboa y final en Dublín durante el cual hará visitas a diversas ciudades de la península ibérica y Francia. Se trata de una travesía especial organizada por la James Beard Foundation, una organización sin ánimo de lucro con sede en Nueva York que promueve el conocimiento del arte culinario americano a través de conferencias y diversas actividades a lo largo de todo el mundo. Cuenta también con un programa educativo de primer nivel e incluso un sistema de becas para sus estudiantes. Los cruceros que la James Bead Foundation realiza en asociación con la naviera Windstar Cruises tienen una temática culinaria y en ellos un equipo de la asociación viaja a bordo realizando numerosas actividades como charlas y «masterclass» a cargo de sus reputados chefs. Durante las travesías también se le hace un guiño a la cocina local organizando excursiones a tierra para conocer los productos típicos de la región que se visita.

La lancha de prácticos y el Star Legend «posando» para la cámara.

Al igual que ocurriera el jueves durante la escala del Marina, los pasajeros del Star Legend no pudieron disfrutar de una meteorología muy benévola y pese a que la temperatiura fue bastante agradable el día por lo general fue gris, con una lluvia fina que por momentos desanimaba bastante a callejear. Eso unido al pequeño tamaño del buque en cuestión hizo que el ambiente en las calles durante la jornada dominical fuese bastante menor que el de otros días con crucero.

Unos detalles sobre nuestro segundo protagonista de hoy: Construido en los astilleros Schichau Seebeckwerft y puesto en servicio en el año 1992 con el nombre de Royal Viking Queen, el actual Star Legend es un buque de 9.961 toneladas de registro bruto con unas dimensiones de 135 metros de eslora, 20´5 metros de manga y un calado de 5´2 metros que puede albergar a 208 pasajeros en capacidad máxima a los que hay que sumarle sus 164 tripulantes. El Star Legend cuenta con dos buques cuasigemelos, también integrantes de la flota de Windstar Cruises; son los navíos Star Pride y Star Breeze

Si por algo es famoso el Star Legend es por su pasado interpretativo y es que este pequeño barco puede presumir de haber sido protagonista de una película de Hollywood (o jollibú). Seguro que muchos de ustedes recuerdan la película Speed, aquel film de acción donde un terrorista colocaba un explosivo en un autobus que haría detonar si éste bajaba de una determinada velocidad. Partiendo de esta premisa, ya de por si retorcida, algunas mentes privilegiadas tuvieron la brillante idea de trasladar la acción a una nave de cruceros y de ahí nació Speed 2. El resultado es el esperable, una película mala de solemnidad en el que podemos ver a nuestro protagonista de hoy pasar las de caín por culpa de un malvado y transtornado informático interpretado por Willem Defoe, que provoca mil y un disgustos al atribulado pasaje entre los que se encuentran Sandra Bullock, que también había estado en el autobus-bomba (también es mala suerte). La escena culmen de la cinta es en la que vemos al pequeño buque estamparse contra una isla caribeña, destrozando a su paso todo lo que encuentra. Cinéma vérité.

Nuestro Star Legend «atracando» en una isla caribeña. En Ferrol optó por una maniobra más convencional.

Tras siete horas de estancia finalmente a las cinco y media de la tarde el Star Legend reinició la marcha para poner rumbo al puerto de Gijón. Al igual que el Marina el pequeño buque norteamericano repetirá visita a Ferrol este año; será el próximo 17 de agosto.

El Star Legend abandonó las instalaciones ferrolanas el pasado domingo a las cinco y media de la tarde.

Para acabar quisiera agradecer su aportación en forma de fotos a dos colaboradores: por un lado Jose R. Montero, habitual suministrador de imágenes para el blog y que no necesita presentación, y por otro a Fernando Allegue, que participa por primera vez . ¡Bienvenido a bordo!.

(Foto: Fernando Allegue)