La naviera Hapag-Lloyd ha anunciado en un comunicado oficial que su buque de expedición Bremen ya no volverá a operar para la compañía germana.
Desde la naviera esgrimen como razones para esta decisión la imposibilidad de implantar a bordo de la nave los estrictos protocolos de distanciamiento social e higiene necesarios para regresar a la actividad, una actividad que Hapag-Lloyd espera reanudar el próximo 8 de agosto.
Este anuncio supone simplemente un adelanto de los acontecimientos ya que el Bremen tenía previsto dejar la flota germana en mayo de 2021. El veterano navío había sido vendido en 2019 a Scylla Cruises y los planes originales eran que operara en régimen de chárter compartido por las navieras VIVA Cruises y Polar Latitudes.
Un veterano de 30 años de edad
Construido en los astilleros japoneses Mitsubishi Heavy Industries y botado en 1990 con el nombre de Frontier Spirit, el Bremen es un buque de 6.752 T.R.B. y 1.226 T.P.M. que tiene unas dimensiones de 111´5 metros de eslora, 17 metros de manga y 4´8 metros de calado. En sus 6 cubiertas de pasaje cuenta con 82 camarotes, todos exteriores, y que le otorgan al buque una capacidad de 184 pasajeros. La tripulación la componen 94 personas. El Bremen operaba para Hapag-Lloyd desde 1993.
El Bremen formaba junto al Hanseatic la oferta de cruceros de expedición de la lujosa compañía alemana. La veteranía de ambos buques llevó a Hapag a ordenar la construcción de tres unidades gemelas con el objetivo de sustituir a sus dos viejos navíos. En 2019 vieron la luz los dos primeros buques, los novedosos Hanseatic Nature y Hanseatic Inspiration, mientras que el tercero, el Hanseatic Spirit, tocó el agua por primera vez la semana pasada en los astilleros VARD de Tulcea (Rumanía). Su entrega está prevista para el 2021.
