Quedan escalas por delante todavía antes de despedir el año, sí, pero la que tuvo lugar el martes fue quizás la última de las jornadas destacadas del presente curso en el puerto herculino en lo que a cruceros se refiere. Y es que no todos los días podemos ver atracada en puerto a toda la flota de una naviera; cierto que en el caso que nos ocupa hablamos unicamente de dos navíos pero la circunstancia es tan inusual que resulta imposible que pase desapercibida. Así los buques Saga Pearl II y Saga Sapphire protagonizaron este pasado martes en A Coruña el «Saga Day«.

Este martes vivimos en A Coruña el «Saga Day».

El Saga Sapphire fue el encargado de inaugurar tan especial jornada con su llegada a las 07:30 horas procedente de la localidad canaria de Arrecife. A bordo de la nave de bandera maltesa llegaron a nuestra ciudad unos 700 pasajeros, que disfrutaron estos días de unas soñadas vacaciones en forma de crucero de dos semanas de duración y del que A Coruña fue su última parada antes de desembarcar en Southampton, punto también inicial de la travesía el pasado 8 de diciembre. Los precios para esta singladura desarrollada en gran parte por el archipiélago canario partían desde los 2.200 euros correspondientes a un camarote interior.

El Saga Sapphire fue el primer componente del dúo en llegar a la ciudad.

El Saga Pearl II por su parte decidió no ser tan madrugador y hasta las 09:00 horas no se dejó ver por aguas interiores del puerto herculino para atracar proa con proa con su compañero de naviera. A diferencia de éste los poco más de 400 pasajeros que viajan a bordo de la perla de Saga Cruises se encontraban con los ánimos por las nubes y es que sus vacaciones acaban de empezar, siendo A Coruña la primera parada de un crucero que se prolongará por espacio de tres semanas y que visitará entre otros los puertos de Lisboa, Cádiz, Civitavecchia (el puerto de Roma) o Gibraltar antes de regresar al punto de partida, también en este caso la ciudad de Southampton, el próximo 8 de enero. De esta manera los cruceristas celebrarán la Nochebuena y el día de Navidad en alta mar y despedirán el año atracados en La Valeta (Malta). Pasar las fiestas navideñas a bordo de un buque de Saga Cruises supone inevitablemente un gran desembolso y más teniendo en cuenta la larga duración de este viaje: los precios del crucero que estos días realiza el Saga Pearl II partían de los 3.900 euros.

Segunda y última visita del año para el Saga Pearl II en la ciudad.

Como mencioné al principio la última escala doble del año ha tenido la particularidad de juntar en nuestros muellles a dos buques de la misma naviera, en este caso Saga Cruises, lo que siempre origina una curiosa estampa en los muellles con dos buques amarrados uno junto al otro compartiendo colores e imagen corporativa… bueno, en el caso particular del pasado martes ésto no fue del todo así y es que a muchos no les pasó desapercibido el hecho de que ambos navíos lucían distintos colores en las chimeneas. Ésto se debió a que Saga Cruises se halla inmersa en un cambio de imagen en el que la marca está recuperando su original color amarillo para las chimeneas sustituyendo al hasta ahora azul bitono corporativo implantado por primera vez hace 8 años precisamente con el debut en la compañía del Saga Sapphire; así la de este martes fue la primera vez que tuvimos la oportunidad de ver en nuestra ciudad a este buque con sus nuevos colores que le fueron incorporados en su reciente puesta a punto llevada a cabo a principios de este mes en los astilleros Lloyd Werft de la ciudad alemana de Bremerhaven.

El Saga Sapphire estrenó el pasado martes en A Coruña sus nuevos colores corporativos que recuperan para la chimenea los tonos que la compañía británica lucía en sus inicios: amarillo, franja blanca y copete azul marino.

Aprovechando la circunstancia que me brinda la coincidencia de toda la flota Saga Cruises en la ciudad esta semana voy a repasar brevemente la biografía de esta naviera, una historia que casi desde sus inicios ha estado muy ligada a nuestro puerto por las frecuentes visitas de sus navíos. Los orígenes del grupo Saga  hay que buscarlos en la década de los 50 del pasado siglo cuando Sidney de Haan funda una compañía vacacional para el mercado británico orientada a gente mayor de 50 años; de aquí viene el nombre de Saga, que no es otra cosa que el acrónimo de «Social Amenities for the Golden Age». Ya centrándonos en los cruceros, Saga Cruises surgió como tal en 1996 cuando tras puntuales iniciativas charteando algún buque de otras compañías se creó la marca con la compra de su primer navío, el Gripsholm, un veterano buque que por entonces contaba con 31 primaveras y que fue rebautizado con el bonito nombre de Saga Rose. El Saga Rose, todo un clásico de los mares, unió su nombre al de la ciudad de A Coruña en el mismo año de su debut con su escala inaugural en 1997 y desde entonces visitó asiduamente la ría herculina hasta que fue vendido para desguace en 2009, no sin antes despedirse de nuestra ciudad con una última visita el 4 de diciembre de 2000, días antes de su retirada oficial.

Primer buque en propiedad de la compañía, el Saga Rose era toda una leyenda de la navegación al que la estricta normativa de seguridad SOLAS 2010 condenó a la desaparición. Dos días antes de poner fín a su dilatada carrera de 44 años, se despidió de todos los coruñeses con una última visita el 4 de diciembre de 2009, al que corresponde esta foto.

El Saga Rose operó durante varios años junto a su gemelo, el Saga Ruby, buque que entró en la compañía de Folkestone en el 2005 tras ser comprado a la naviera Cunard, que lo operaba como Caronia. Estos dos navíos se convirtieron en todo un éxito mientras operaron para la compañía británica, consiguiendo captar una clientela fiel que es conocida en el sector como los «saganautas»; de hecho Saga Cruises es una de las navieras con mayor porcentaje de cruceristas repetidores. Tras la triste desaparición del Saga Rose el Ruby mantuvo viva la llama de la navegación de placer tradicional durante cinco años más hasta que finalmente a principios de 2014 fue vendido, terminando sus días convertido en chatarra. Antes de su cruel final el Saga Ruby, otro habitual de aguas coruñesas, también quiso despedirse de la ciudad en su último año en activo; fue el 27 de octubre de 2013.

Último buque de cruceros construído en el Reino Unido, la desaparición del Saga Ruby supuso el fín de toda una era dentro de la industria crucerística. En A Coruña sus presencias fueron muy habituales como la de la foto en la que podemos ver al ilustre navío zarpando de la dársena herculina.

Pese a estar orientada hacia un público situado ya en «la edad de oro», como bien reza su nombre, Saga decidió crear un nuevo producto para captar una clientela más joven y en 2005 fundó la marca Spirit of Adventure Cruises comprando otro veterano navío con 25 años de vida marinera sobre sus cuadernas que fue rebautizado como Spirit of Adventure. El buque ofrecía rutas por destinos exóticos y poco frecuentados en el circuito crucerístico convencional, un componente aventurero el de estas singladuras que en ocasiones llegó a alcanzar tintes peligrosos como en un viaje en el que la nave estuvo a punto de ser abordada por piratas en las peligrosas aguas del golfo de Somalia. Tras casi 6 años de vida, Saga Cruises decidió dar por concluída su experiencia aventurera y a principios de 2012 cerró la marca Spirit of Adventure Cruises vendiendo el buque homónimo a la naviera germana FTI Cruises, que lo rebautizó con su actual nombre de Berlín.

 

El Spirit of Adventure era la apuesta crucerística de Saga por captar un cliente tipo muy alejado del habitual crucerista de la compañía inglesa. El buque lucía una imagen corporativa propia muy diferenciada de la clásica de Saga Cruises como podemos ver en esta foto de una de sus escasísimas presencias en la ciudad herculina.

Ya conocemos el pasado de la compañía Saga Cruises y de momento lo dejamos aquí pero en la segunda parte de esta entrada especial os contaré el presente y el prometedor futuro de esta naviera inglesa, así como más detalles sobre la escala doble que protagonizaron sus buques esta semana en A Coruña.

Mañana seguiremos desgranando lo que dió de sí el «Saga Day«.

Las fotos de esta entrada han sido realizadas
por Diego Veiga. Por favor, respetad la autoría de todas ellas.