Las escalas de buques de cruceros siguen produciéndose a un excelente ritmo; buena prueba de ello es que este martes ha tenido lugar la sexta escala del mes a cargo del navío L´Austral, uno de los barcos más exclusivos de su segmento y posiblemente uno de los que menos desapercibido pasa amarrado en cualquier puerto a pesar de su pequeño tamaño.

Con una hora de llegada poco habitual para este tipo de tráficos, la lujosísima embarcación francesa arribó a la ciudad sobre las 11 de la mañana procedente de Leixoes. A bordo unos 250 pasajeros que iniciaron el pasado domingo en la ciudad de Lisboa una travesía de 12 días por diversos puertos de la Península Ibérica, Francia e Irlanda. Previa a su partida desde la capital portuguesa el L´Austral ha pasado dos semanas en los astilleros Lisnave de Setubal adonde arribó el pasado 4 de abril para realizar varias reparaciones así como la renovación en algunos interiores y los habituales trabajos de pintura en el casco.

El L´Austral procedía de Portugal.

Más de un paseante que en el momento de la llegada del L´Austral a la ría herculina se encontrara por las inmediaciones de la costa pensaría que el buque que lentamente se acercaba era el megayate de algún millonario ruso o árabe. Nada más lejos de la realidad; nuestro protagonista de hoy es una nave de cruceros como otras muchas de las que salen habitualmente en este blog.

¿Es un crucero o un megayate?. Viendo aparecer al L´Austral por el horizonte es muy fácil que se nos plantee la duda.

Bueno, tampoco ésto es muy exacto puesto que el L´Austral se puede equiparar con muy pocos navíos de su tipo salvo por el hecho de dedicarse a la navegación de placer. Propiedad de la naviera Compagnie du Ponant, el L´Austral es uno de los más destacados representantes de los llamados barcos boutique, un nicho de mercado crucerístico formado por navíos que comparten dos características esenciales: su pequeño tamaño que se traduce en una menor capacidad de pasaje y que implica a su vez una mayor atención al turista, y unas dosis de lujo a bordo como dificilmente se pueden encontrar en ningún otro objeto flotante. Es en esta categoría donde dominan los nombres de Seabourn, Silversea, Hapag-Lloyd, SeaDream… y por supuesto el de Ponant con su nueva generación de navíos, uno de los cuales es el que pueden ver en estas fotos.

Ponant es uno de los grandes nombres dentro del nicho de mercado de los barcos boutique.

Construído en los astilleros Fincantieri de la ciudad de Ancona (Italia) y puesto en servicio en el año 2011, el L´Austral en un buque de 12.500 toneladas de registro bruto con unas dimensiones principales de 142 metros de eslora, 18 metros de manga y 4´7 metros de calado. En sus 6 cubiertas de pasaje el navío puede albergar a 264 pasajeros en capacidad máxima en alguno de sus 132 camarotes, todos ellos exteriores teniendo el 94% de los mismos balcón privado. La tripulación del barco está formada por 136 personas. El L´Austral es el segundo de una serie de 4 buques practicamente gemelos  (los otros integrantes son el Le Boreal (2010), el Le Soleal (2012) y el Le Lyrial (2015) y está abanderado en las islas Wallis y Futuna, un archipiélago de la Polinesia francesa, siendo su puerto de registro el de Mata Utu.

Arriba: Casi la totalidad de los camarotes del L´Austral poseen balcón privado.
Abajo: Su exótico puerto de registro, Mata Utu, se encuentra en la Polinesia francesa.

Y si por fuera su aspecto no puede calificarse de otra manera que de muy atractivo, en el interior el L´Austral es el colmo de la sofisticación y la clase; siendo francés no se me ocurre mejor término para definirlo que «chic». Una vez traspasada la escala de acceso el ambiente que se respira a bordo de esta magnífica nave sigue siendo el mismo que transmite su estampa vista a pie de muelle: una atmósfera de megayate privado que por unos días es de nuestra propiedad. Para ello sus constructores contaron con el prestigioso diseñador galo Jean-Philippe Nuel que vistió al buque por dentro con metales preciosos y maderas nobles utilizando tonos oscuros como paleta cromática principal. Puede que a muchos estos interiores sencillamente no les digan nada porque en la práctica ha desaparecido cualquier reminiscencia del mundo marítimo pero lo que no se puede negar es que su imagen exterior no puede casar mejor con lo que nos ofrece el L´Austral a bordo. Pura sofisticación.


Arriba: El atrio del L´Austral es el ejemplo perfecto del estilo que nos encontramos a bordo de esta lujosa nave. 
Abajo: Ese mismo ambiente se respira en todas y cada una de las estancias del buque.
(Fuente: Compagnie du Ponant)

Sofisticado sí. Y solidario también. El L´Austral tuvo la oportunidad de demostrar hace unos meses que los términos que dan título al post de hoy no son para nada excluyentes cuando prestó un valioso auxilio a otro buque de crucero que había sufrido un serio percance. No se trataba de un navío cualquiera sino del Le Boreal, compañero de flota y gemelo de nuestro protagonista de hoy que el pasado 18 de noviembre sufrió un incendio en su sala de máquinas que lo dejó a la deriva cerca de las Islas Falkland, más conocidas como las Malvinas.

El L´Austral tuvo que demostrar hace unos meses sus cualidades solidarias ayudando a su buque gemelo. En la foto el barco galo aparece con otro navío acostumbrado a prestar auxilio, el SAR Gavia.



Pese a que el incendio, que se declaró de madrugada, fue rapidamente controlado por los  miembros de la tripulación, los daños provocados y que afectaron a la propulsión de la nave obligaron a realizar la evacuación del pasaje y de parte de la tripulación como medida preventiva. Fue el L´Austral, que se encontraba navegando muy cerca de la zona donde tuvo lugar el siniestro, el primero que acudió al auxilio de su buque hermano y el que acogió a la mayoría de los que iban a bordo. Tras el trasvase de personas el L´Austral modificó su ruta y puso rumbo a Port Stanley (Islas Malvinas) desde donde fueron repatriados los cruceristas hacia sus países de origen ante la imposibilidad de que el Le Boreal pudiera continuar viaje.

Volviendo al pasado martes y tras una breve estadía de siete horas en la ciudad, a las seis de la tarde el L´Austral se puso de nuevo en movimiento para dirigirse a su siguiente destino, el puerto de Santander. Sin más escalas en la ciudad por la proa  es bastante probable que tardemos en volver a ver por nuestras aguas a este espectacular barco ya que tras su campaña por el Báltico que tendrá lugar este verano y su posterior periplo por el cículo polar ártico, el L´Austral será reposicionado a partir de octubre en la región Asia-Pacífico ofreciendo cruceros por Japón, Indonesia y Australia a lo largo de todo el 2017. Esperemos que en su regreso a Europa, todavía sin fecha fijada, repita visita a A Coruña.

Tendremos que esperar como mínimo hasta 2018 para volver a ver al L´Austral por nuestra ría.

Salvo
las que así lo indiquen las fotos de esta entrada han sido realizadas
por Diego Veiga. por favor, respetad la autoría de todas ellas.