No se si son propios de esta época del año ya que mis conocimientos en botánica están un poco oxidados, pero lo cierto es que ahí está la prueba: un enorme tulipán «floreció» el pasado sábado 20 de agosto en mitad del puerto. Les hablo del Buque Ryndam de la naviera de origen holandés Holland America Line, que realizó su primera escala en A Coruña.

Muy pronto quiso el Ryndam iniciar su historia en el muelle coruñés. Poco antes de las 06:00 horas la nave maniobraba ya en las instalaciones portuarias procedente de St. Malo para quedar amarrado media hora más tarde. Eso si, de poco le sirvió el madrugón puesto que a pesar de llegar primero fue relegado al muelle de Calvo-Sotelo Sur por compartir fecha de escala con el MSC Opera, que recalaría algo más tarde (digamos que este verano, el MSC Opera es el «enchufado» y le va a tocar siempre el mejor amarre).

Escalas a pares: El MSC Opera (derecha) atracado en el muelle de 
trasatlánticos, mientras que el Ryndam (izquierda) asoma el «hocico» por 
encima del Urania Mella en su amarre de Calvo-Sotelo Sur.

Quizás no nos hallemos ante el buque más espectacular de la naviera Holland America Line (ahí posiblemente le ganen la partida los de la clase Vista como los Noordam u Oosterdam que visitaron nuestra ciudad en alguna ocasión). Donde se pueden plantear más dudas es en si se trata de la nave más lujosa puesto que toda la flota de la compañía americana (holandesa en origen, la Holland America pertenece ahora al gigante estadounidense Carnival Corp.) goza de un estatus de naviera premium ganada a pulso por la calidad y servicio presentes en cada una de sus unidades.

El Ryndam es el tercero de una serie de 4 buques gemelos tras el Statendam, el Maasdam y antes del Veendam (la serie recibe el nombre del primer buque construido, la «Statendam Class» o de forma abreviada «S-Class») y entró en servicio en noviembre de 1994. Por aquel entonces sus números eran más que llamativos, aunque sin marcar récords: 55.451 toneladas de registro bruto, 219 metros de eslora, 30.8 metros de manga y 7,5 metros de calado. Hoy en día estas cifras convierten al Ryndam en un crucero «grandote» dentro de los de tamaño medio.

El nombre de Ryndam ya había sido usado antes por la naviera para bautizar a dos de sus buques y es que Holland America es muy tradicional en esto de los nombres y alguno de ellos cuenta con una historia que se remonta a los inicios de la compañía, allá por el año 1873. El origen de este nombre proviene del río Rin, que en neerlandés se escribe Rijn; De hecho esa era la grafía usada en los buques anteriores, pero como para los nacidos fuera de las fronteras de los Países Bajos lo de la -i la -j y la -n juntas es complicadito de pronunciar, se cambió por Ryn- que resulta más fácil de digerir. El sufijo -dam se aplica a los buques holandeses de pasaje, usando para los de carga el sufijo -dijk (dato que puede ser útil en alguna partida del Trivial).

Una de las particularidades del Ryndam es su bandera, y es que acostumbrados a ver pabellones de Bahamas, Liberia, Malta o Panamá, este buque navega bajo pabellón holandés, al igual que el resto de la flota Holland America Line y en su casco se puede leer el nombre del puerto de Rotterdam. No siempre ha sido así; cuando se botó, el Ryndam, al igual que sus compañeros portaban bandera de Bahamas pero en 1996 todos los barcos de la Holland America cambiaron a pabellón holandés gracias al abratamiento de las tasas de matriculación de buques que tuvo lugar ese año en el país de los tulipanes. Toda la flota sufrió el cambio inmediato excepto el Ryndam que tuvo que hacerlo un año más tarde ante la imposibilidad de encontrar oficiales holandeses para formar su dotación (requisito indispensable para llevar a cabo el cambio de pabellón).

El Ryndam navega bajo bandera… ¡eh!, ¿pero quien se ha llevado la bandera?

Pero como mencioné antes el Ryndam no fue el único protagonista del día en los muelles. Una hora más tarde que el crucero neerlandés hacía su entrada el MSC Opera en la que supone su 6ª llegada en lo que va de año y la 3ª en este mes de agosto.

La Torre de Hércules «saluda» al MSC Opera a su llegada a la ciudad el 
pasado sábado. A esas horas el Ryndam ya se encontraba atracado en el
muelles coruñés.

Tras una soleada jornada los 3.500 cruceristas llegados en ambas naves volvieron a sus hoteles flotantes para reanudar viaje. El primero en hacerlo fue el MSC Opera, que como viene siendo habitual soltó cabos a las 17:00 horas para poner rumbo norte hacia tierras francesas.

El Ryndam por su parte se hizo algo más el remolón y su salida, prevista inicialmente también para las 17:00 horas se demoró un poco y hasta pasadas las 18:00 horas. Durante el tiempo de espera me entretuve observando las evoluciones el mercante Tina C. que saliendo del fondeadero de Ares hacía tiempo realizando maniobras a la espera de que el práctico sacara el crucero holandés.

 ¡Por fin!.  El Ryndam se cruza durante su salida de la ciudad con el 
mercante Tina C. que esperó pacientemente durante más de una hora en la 
entrada del puerto a que el crucero holandés zarpara.