Visita destacada el pasado viernes en los muelles herculinos con la escala del buque Celebrity Silhouette de la naviera norteamericana Celebrity Cruises, un navío inédito hasta ahora en aguas coruñesas.

La escala del viernes supuso el debut del Celebrity Silhouette en el puerto de A Coruña.

Procedente de Bilbao la nave de Celebrity dejó ver su esbelta silueta por la ría herculina sobre las ocho y media donde sus tripulantes y pasajeros, 2.600 sumaban estos últimos, fueron recibidos por una mañana soleada aunque algo fresca. Tras rebasar el dique de abrigo y despertar a media ciudad con tres sonoros bocinazos que sirvieron como saludo de bienvenida, el Silhouette realizó un armonioso giro de 180 grados para atracar dando atrás en el muelle de trasatlánticos. La maniobra fue seguida desde tierra por decenas de curiosos pero también desde los balcones de los camarotes del buque, donde un llamativo colorido indicaba que éste no era un crucero como los demás que suelen atracan en la ciudad habitualmente…

A primera hora de la mañana el Silhouette hacía su estreno en la dársena herculina.
(Foto: Manuel Candal)

Y es que en esta ocasión el Silhouette está fletado por un touroperador norteamericano y se encuentra realizando un crucero gay, en el que todos sus pasajeros son varones. No es la primera vez que un buque de Celebrity toca nuestro puerto en el marco de un crucero de esta temática; en otras ocasiones otros barcos de su flota como el Celebrity Eclipse o el Constellation ya atracaron en la urbe herculina enarbolando la bandera multicolor. Se trata de un nicho de mercado cada vez más demandado y que las compañías tratan de explotar ya que cuentan con un cliente tipo de alto nivel cultural y, lo más interesante para el «business», de gran poder adquisitivo.

Una llegada muy colorida: Numerosas banderas eran visibles en muchos de los camarotes, la más repetida la multicolor representativa del colectivo LGTBQI.

Así los 2.600 turistas llegados a bordo del Silhouette partieron el pasado lunes desde la ciudad de Amsterdam iniciando una singladura de dos semanas de duración por el Atlántico y el Mediterráneo con escalas en los puertos de La Rochelle, Bilbao, A Coruña, Lisboa, Cádiz, Málaga y Valencia antes de finalizar la ruta en Barcelona el próximo día 14. La agencia de turismo especializado «Holigays» vendía pasajes para este crucero desde los 2.000 euros correspondientes a un camarote interior.

 Como mencioné al principio la visita del Celebrity Silhouette el pasado viernes supuso su escala inaugural en el puerto herculino, la quinta de una nave de cruceros que tiene lugar en A Coruña en lo que llevamos de año y como suele ser habitual en estas ocasiones hubo intercambio de regalos entre la tripulación de la nave y los representantes de la autoridad portuaria en una ceremonia celebrada a bordo de la nave.

(Foto: Manuel Candal)

Inaugural sí, pero ¿no se hace conocida la silueta del Silhouette? Pues lo cierto es que sí y se debe a que por A Coruña se deja caer de vez en cuando su hermano gemelo, el Celebrity Eclipse, del que resulta practicamente imposible distinguirlo a simple vista. El Celebrity Silhouette es el cuarto integrante de la Solstice Class, una serie de cinco unidades «casi» gemelas que vio la luz en el año 2008 con la entrada en servicio del buque que da nombre a la familia, el Celebrity Solstice. Tras él llegaron el Equinox (2009) y el mencionado Eclipse (2010). La Solstice Class, que en principio iba  a contar tan sólo con tres barcos, fue ampliada en 2011 con la construcción de nuestro protagonista de hoy, que presenta ligerísimas variaciones respecto al esquema original tanto en dimensiones (tiene 4 metros más de eslora) como en capacidad de pasajeros (acomoda a 36 turistas más). El Celebrity Reflection cerró la saga en el año 2012 si bien este buque ya presenta mayores diferencias respecto a sus 4 predecesores así como una cubierta más.

El Celebrity Silhouette es el cuarto de los cinco integrantes de la Solstice Class.

 Centrándonos en el Celebrity Silhouette hablamos de un navío de 122.210 toneladas de registro bruto construído al igual que el resto de la serie en los astilleros Meyer de Papenburg (Alemania) y que cuenta con unas dimensiones principales de 319´2 metros de eslora, 36´8 metros de manga y un calado de 8´5 metros. En sus 17 cubiertas, 14 de ellas reservadas en exclusiva para el pasaje, la nave puede albergar a un total de 2.886 pasajeros en acomodación normal gracias a sus 1.443 camarotes de los cuales 1.216 (el 84%) poseen terraza privada. La tripulación la componen un total de 1.210 personas.

Un amplísimo porcentaje de las cabinas del Celebrity Silhouette presentan la tan demandada terraza privada.

En el apartado mecánico el Silhouette presenta la ya habitual propulsión diésel-eléctrica con 4 motores diesel common-rail Wartsila capaces de producir un total de 67.200 KW, y dos pods azimutales capaces de girar 360 grados (no hay timones) que pueden impulsar la nave hasta los 24´5 nudos de velocidad máxima.

El Celebrity Silhouette durante la maniobra de atraque del pasado viernes.

Como gemelo de sus tres hermanos que le precedieron en el tiempo el Silhouette no cuenta con ninguna primicia en el sector pero cuando vio la luz en 2008 la Clase Solstice asombró al mundo por varios méritos técnicos, algunos de los cuales eran en su día soluciones completamente innovadoras. Muchas de ellas se centraron en la eficiencia energéntica de la nave a fín de lograr la clase de buques más respetuosos con el medioambiente. Así el estudiadísimo casco del Silhouette, para el que se realizaron hasta 90 tests hidrodinámicos en modelos a escala, está pintado con una pintura especial de silicona que reduce la fricción con el agua durante el avance de la nave y sus motores common-rail reducen notablemente el consumo de carburante y las emisiones de óxido de nitrógeno. Este ahorro de combustible también se consigue con el uso masivo de leds en la iluminación interior de la nave, que supone un 80% de ahorro respecto a la luz halógena. Además el Celebrity Silhouette lleva instalados 216 paneles solares situados junto a sus dos chimeneas y en la zona del solarium con una superficie total de 500 metros cuadrados y que producen suficiente energía para, por ejemplo alimentar todos los ascensores de la nave. El enorme uso de zonas acristaladas exteriores también evita el calentamiento excesivo de las cubiertas, filtrando además el 99´9% de los rayos UV, lo que permite ahorrar energía en los sistemas de climatización. Un ejemplo de lo extremadamente exigentes que fueron los ingenieros que proyectaron la Clase Solstice en lo referente al ahorro de energético lo encontramos en las máquina que fabrican el hielo: las de estos barcos usan un 65% menos de agua y gastan un 50% menos de energía respecto a las de barcos precedentes.

Y en cuanto a instalaciones a bordo para el disfrute del crucerista el Silhouette, al igual que sus hermanos de la Solstice Class, destaca por la presencia del Lawn Club en la cubierta 12, un club de campo cuya superficie está recubierta de dos mil metros cuadrados de césped real y en la que los cruceristas pueden practicar diversas actividades: desde jugar al minigolf o los bolos, a hacer un picnic o simplemente caminar descalzo sintiendo la agradable sensación que provoca la hierba bajo nuestros pies.

En esta foto aérea podemos ver una de las principales señas de identidad de los buques de la clase Solstice, su cubierta recubierta de césped real y que forma el Lawn Club. La foto también nos sirve para apreciar los paneles solares situados en la zona de las chimeneas.
(Fuente: Celebrity Cruises)

Volviendo al pasado viernes y tras casi 8 horas de estancia en la ciudad, a las cinco de la tarde el buque de bandera maltesa dio por concluída su escala en A Coruña anunciando con los tres bocinazos de rigor su inminente partida. Tras soltar amarras y doblar el dique la nave ganó velocidad y puso proa a su siguiente destino, el puerto de Lisboa. Sin más recaladas por la ría herculina de aquí a que acabe el año tendremos que esperar hasta el 31 de octubre del 2018 para volver a ver a este prodigio de la ingeniería naval, aunque no tanto para ver de nuevo a un Clase Solstice; en unos días, concretamente el 19, recibiremos la visita de uno de los hermanos del Silhouette, el Celebrity Eclipse.

El Silhouette regresará a la ciudad a finales de 2018.

Agradecimientos a Manuel Candal por su colaboración en forma de estupendas fotografías para la ilustración del post de hoy.

 Salvo
las que así lo indiquen, las fotos de esta entrada han sido
realizadas por Diego Veiga. Por favor, respetad la autoría de
todas ellas.