El buque Aegean Odyssey, aunque con un sutil matiz, ha sido el encargado este viernes de dar el pistoletazo de salida al septiembre crucerístico, mes que de hacer caso a las previsiones batirá todos lo récords habidos hasta ahora en la rada herculina en lo referente a número de escalas aunque para ello habrá que esperar al día 30. De momento el día 1 ya tuvimos al primero, aunque como veremos a continuación su consideración como primer buque del mes hay que ponerla entre comillas.

Aegean Odyssey cerrando el mes de agosto… o abriendo el de septiembre, según se mire.

Si nos ceñimos a los hechos el buque en cuestión no ha sido el primero de septiembre sino el último de agosto. En un principio la llegada del Aegean Odyssey a A Coruña procedente de Burdeos estaba prevista para primera hora del viernes pero un pequeño ajuste de horarios hizo que la veterana nave de cruceros alcanzase la costa herculina a última hora de la tarde del jueves para que sus 271 pasajeros tuvieran la oportunidad de aprovechar mejor su escala en tierras gallegas. Así el Odyssey maniobraba en aguas interiores del puerto herculino a las 21:00 horas y con las últimas luces del último día de agosto para convertirse en el primer buque del año en pernoctar en la ciudad.

A última hora de la tarde del jueves el Aegean Odyssey asomaba el hocico tras el dique de abrigo.

Voyages to Antiquity, la naviera para la que opera este navío ya entrado en años presume de ofrecer cruceros cuyas travesías se apartan bastante del estándar que suele ser habitual en el sector; son cruceros de bastante duración (de 15 a 30 días normalmente), que hacen largas escalas en lugares que en muchos casos son poco habituales dentro del circuito crucerístico y con un marcado perfil cultural. La travesía que ha traído al Odyssey a nuestra ciudad este viernes cumple con estos tres requisitos: Se trata de una singladura de dos semanas de duración iniciada el pasado día 22 en Londres y que llegó a tierras gallegas tras recalcar en varios puertos de Francia como Honfleur, St. Malo, Nantes, La Rochelle y la mencionada capital del departamento de Gironda, de donde procedía a su llegada a aguas herculinas. Tras A Coruña el buque puso rumbo a la dársena de Leixoes, parada previa al punto final de la ruta situado en Lisboa. La naviera británica ofreció la oportunidad a los pasajeros del Aegean Odyssey que toman parte en esta ruta de prolongar su crucero de ensueño uniéndolo con el siguiente itinerario, formando así un espectacular viaje de 27 días de duración que los llevará por varios capitales del Mediterráneo hasta su desembarque definitivo en Civitavecchia, el puerto de Roma.

La naviera Voyages to Antiquity ofrece una alternativa muy diferenciada a lo que es común en el sector crucerístico a bordo de su buque Aegean Odyssey.

Los clásicos de los mares siempre tienen un encanto añadido que no tienen los cada vez más mastodónticos megacruceros actuales y más si como en el caso de nuestro protagonista de hoy nos resulta poco conocido. La de este viernes fue la segunda escala en la ciudad para el Aegean Odyssey, un navío que vio la luz en 1973 bajo el nombre de Narcís  en los astilleros Santierul Naval (hoy Damen Shipyards) de la ciudad rumana de Galati. El nombre no es lo único que ha variado en estos 44 años ya que originalmente no se trataba de una nave de cruceros sino de un buque de carga rodada (un RoRo, vamos) que tenía a popa dos enorme rampas para acomodar vehículos en sus garajes, instalaciones que desaparecieron a mediados de la década de los 80 del pasado siglo cuando fue reconvertido a su actual configuración.

Aunque no lo parezca el buque que sale en la foto es el Aegean Odyssey durante sus inicios.
(Foto: autor desconocido)

El Aegean Odyssey es un buque de 12.094 toneladas de registro bruto que tiene tiene unas discretas dimensiones principales de 140´5 metros de eslora, 20´4 metros de manga y un calado de 6´1 metros. Sus 7 cubiertas de pasaje albergan a 386 pasajeros en acomodación normal en alguno de sus 216 camarotes de los cuales tan sólo 42 tienen terraza privada (aquí se nota la edad del navío). 26 camarotes están destinados a aquellos que viajen solos. En el apartado mecánico tenemos dos motores diésel Pielstick-Crossley de 14 cilindros que producen un total de 10.300 KW y que mediante 2 hélices impulsan el conjunto hasta los 16 nudos. El Aegean Odyssey navega bajo pabellón panameño y su «callsign» o identificativo de llamada es HOBW.

El Aegean Odyssey visita A Coruña por segundo año coinsecutivo.

Lo habitual en una previsión de escalas en un determinado puerto es que alguna de ellas se «caiga» debido a variados factores. Pero lo cierto es que a día de hoy esas previsiones apuntan a que en los 30 días que dura septiembre en el puerto coruñés se producirán un total de 30 recaladas de buques de cruceros, hecho sin precedentes en la historia de la ciudad. La cuenta está clara: sale a un crucero por día en la ciudad pero la cosa no estará tan repartida: Durante 21 jornadas el muelle de trasatlánticos y sus anexos contarán con algún inquilino atracado en sus norays con varios días en los que habrá doblete (los días 2, 12, 20, 21, 26 y 28) y con 2 tripletes en las jornadas del 6 y del 19. Sólo en la semana del 18 al 24 tienen previsto atracar nada más y nada menos que 10 cruceros en 7 días.

Si nos centramos en los que serán los protagonistas, en este recién inaugurado mes veremos por A Coruña  un buen muestrario de lo más variopinto que nos podemos encontrar actualmente en el panorama crucerístico mundial, desde los más grandes megacruceros que operan actualmente en el continente europeo hasta los pequeños y coquetos buques de expedición tan de moda ultimamente, pasando por algunos navíos recién salidos del astillero. Habrá un total de 4 naves inéditas hasta la fecha en la rada herculina: el lujoso Silver Muse (que hizo escala ayer), el Celebrity Silhouette, el Costa Favolosa y el MSC Fantasia, y sin ser novedades en la ciudad destacarán buques como el Britannia, el Independence of the Seas, el Costa Magica, el Seven Seas Explorer, el Koningsdam o el Mein Schiff 3 por citar sólo algunos.

El Aegean Odyssey transitando ante los faros de Mera durante su salida de la ciudad el pasado viernes.

Volviendo a la jornada de este pasado viernes el Aegean Odyssey dio por concluída su estancia en la ciudad sobre las séis de la tarde tras casi 24 horas de escala cuando el buque soltó amarras y tras superar el dique de abrigo puso rumbo sur en dirección a Leixoes, habitual destino de este tipo de navíos para que sus cruceristas visiten la bella ciudad de Oporto. El Aegean Odyssey repetirá visita a Marineda en 2018: será el 30 de agosto.

A finales del próximo verano volveremos a ver por nuestra ría a la «odisea egea«.

Salvo las que así lo indiquen las fotos de esta entrada han sido realizadas
por Diego Veiga. Por favor, respetad la autoría de todas ellas.