(Foto: J. Daniel Díaz)

Los caprichos del calendario a veces tienen coincidencias que asustan; ha querido el azar que el buque AidaLuna, protagonista hoy en el post y ayer en los muelles, regresara a A Coruña tras un largo período de ausencia y lo hiciera justo la misma semana en la que se cumplen 10 años de su estreno en la urbe herculina. Parece cosa de meigas.

Mucho ojo con el post de hoy…

Pero antes  de pasar a narrar los aspectos más interesantes en torno a esta efeméride voy a comentaros lo que dio de sí su visita de ayer. Procedente de Ponta Delgada el AidaLuna llegó a primera hora de la mañana con unos 2.000 pasajeros a bordo, alemanes en su totalidad. La visita contó con un detalle muy curioso y es que fue una escala con dos atraques; inicialmente el Luna atracó por su costado de babor y por la tarde desatracó y volvió a atracar, esta vez por su costado de estribor. El motivo de este extraño movimiento fue que el buque aprovechó su estancia en la dársena herculina para cargar diverso material con la ayuda de una grúa de 100 toneladas con motivo de la varada que llevará a cabo la próxima semana a su llegada a Hamburgo y que lo tendrá dos semanas en dique seco.

Los cruceristas llegados a bordo del AidaLuna gozaron de un estupendo día en lo climatológico.
(Foto: Manuel Candal)

El viaje que ha traído al AidaLuna de visita a nuestra ciudad es un crucero de reposicionamiento en el cual la nave ha abandonado el Caribe, base de operaciones durante su temporada invernal, para dirigirse a Europa, más concretamente a Hamburgo, donde establecerá su base hasta mediados del mes de mayo. Así el Luna zarpó de Montego Bay (Jamaica) el pasado 16 de marzo y tras un periplo por varios destinos caribeños como Samana (Rep. Dominicana), Tórtola (Islas Vírgenes Británicas) y Philipsburg (Sint Marteen) cruzó el Atlántico previa parada intermedia en el mencionado archipiélago de las Azores. A Coruña es la primera escala del 2019 en la Europa continental para el navío de Aida Cruises y a la que seguirán las visitas a Le Havre y Dover antes de poner fin a la ruta en Hamburgo el próximo miércoles. 3 semanas de crucero cuyos precios partían de los 1.550 euros correspondientes a una cabina interior.

Como comenté al inicio la escala que este viernes realizó el AidaLuna en nuestra ciudad ha coincidido con el 10º aniversario del inicio de su andadura comercial y con su escala inaugural en A Coruña que tuvo lugar un 27 de marzo de hace justo ahora 10 años. Aquel día el Luna se estrenaba en aguas gallegas como parte de su viaje inaugural, una singladura de dos semanas de duración que lo llevaría desde el puerto de Hamburgo hasta el de Palma de Mallorca. Además de por ser inédito, la escala del AidaLuna tuvo especial relevancia porque el navío germano atracó en el muelle de trasatlánticos sin haber celebrado su bautizo oficial, una circunstancia calcada a la vivida a principios de febrero de este año con el buque Mein Schiff 2. Precisamente sería a su llegada al puerto balear donde el AidaLuna realizaría dicha ceremonia de bautismo.

El AidaLuna atracado en el muelle de trasatlánticos durante su visita inaugural a la ciudad hace ahora 10 años. Todavía puede verse la antigua caseta que hacía las funciones de terminal de cruceros.

Construcción nº660 de los astilleros Meyer situados en la localidad germana de Papenburg, el AidaLuna es un buque 69.203 toneladas de registro bruto y 8.654 toneladas de peso muerto que tiene como dimensiones principales una eslora de 253´3 metros, 32´2 metros de
manga y un calado de 7´3 metros. Cuenta con un total de 13 cubiertas de
pasaje en las que puede alojar hasta 2.050 pasajeros en doble ocupación a los que hay que
sumarles sus 646 tripulantes. El coste constructivo del buque está estimado en unos 315 millones de euros.

El AidaLuna es el tercero de una de las más exitosas familias de buques de cruceros, la Sphinx-Klasse (Clase Esfinge) y que vio la luz por primera vez en el año 2007 con la botadura del AidaDiva. Prevista inicialmente con 4 unidades, el éxito obtenido por los nuevos navíos de Aida llevó a Carnival, marca matriz de la compañía germana, a encargar hasta un total de 7 navíos de esta clase. Nuestro protagonista de hoy es el tercero de la serie tras el AidaBella, que ostenta el honor de ser el primer «esfinge» en estrenarse en aguas de la ría coruñesa (septiembre de 2008). Tras el Luna llegarían el Blu (2010), el Sol (2011), el Mar (2012) y el Stella (2013), todos ellos ya con ligeras modificaciones respecto al diseño original que los hacen mayores en volumen a las tres unidades precedentes.


Los 7 buques de la Sphinx-Klasse son asiduos visitantes de nuestra ciudad.
(Foto: Manuel Candal)

Pese a que en esencia el AidaLuna es una copia de sus dos hermanos anteriormente botados, el Diva y el Bella, nuestro protagonista incorporó algunas novedades; la principal fue la instalación de una gran pantalla en la cubierta 14 junto a la zona de piscinas. Ésta está compuesta por 187.000 LEDS y tiene unas medidas
de 7,17 metros de ancho por 4,03 metros de alto y está destinada a varios usos: desde ver películas a
modo de cine al aire libre hasta jugar a la Wii. Los 4 cañones láser situados a cada lado de la pantalla se usan también para celebrar espectáculos de luz y sonido con música en directo a cargo de un Dj. Hoy en día este tipo de pantallas son moneda común en los cruceros pero en la fecha en la que nos ocupa aún no eran tan habituales y su presencia llamaba mucho la atención. El AidaLuna pasará a la historia por ser el primer buque de Aida Cruises en incorporarla.

El pantallón que el AidaLuna luce en la cubierta de piscinas fue uno de los detalles que más llamó la atención durante la escala inaugural del buque en A Coruña.

Volviendo a la jornada de ayer el AidaLuna se tomó con calma su estancia en A Coruña y prolongó su visita hasta las ocho de la tarde, una hora más de lo inicialmente previsto, momento en el que soltó amarras y zarpó rumbo a aguas francesas. Sin más visitas programadas para este año el Luna regresará en 2020 a aguas coruñesas y lo hará en otra fecha simbólica, el 27 de marzo, día en el que se cumplirá el 11º aniversario de su debut en la ciudad. Agradecimientos tanto a Manuel Candal como a J. Daniel Díaz, autores de gran parte de las fotos que ilustran la entrada de hoy. Las demás están tomadas de mi archivo personal y pertenecen a la escala inaugural realizada por el AidaLuna en A Coruña el 27 de marzo de 2009.

El AidaLuna se despidió de la ciudad con las últimas luces del día. Volverá en 2020.
(Foto: J. Daniel Díaz)


Salvo las que indican lo contrario, las fotos de esta entrada han sido realizadas
por Diego Veiga. Por favor, respetad la autoría de todas ellas.