Una fugaz visita la protagonizada el pasado día 20 por el Aurora, uno de esos barcos ya clásicos en nuestro puerto y que nuevamente volvió a hacernos compañía por unas horas en la que suponía su tercera recalada del año en tierras herculinas. El buque, propiedad de la naviera británica P&O, llegó a primera hora del pasado jueves procedente del puerto de Southampton, punto de partida de una singladura de dos semanas por el Atlantico con escalas en España, Portugal y Marruecos, una espectacular travesía que a buen seguro disfrutaron los casi 2.000 pasajeros que llevaba a bordo la nave británica y que aprovecharon la parada en tierras gallegas para realizar las oportunas excursiones contratadas, con la visita a Santiago como plato fuerte, o simplemente callejear por el centro de la urbe.

(Foto: Manuel Candal)

Pese a lo breve de la escala la presencia del Aurora el pasado jueves en el puerto herculino cobra una especial relevancia por tener lugar tan sólo unos días antes de que el buque entre en dique seco para llevar a cabo una profunda reforma que no sólo afectará a sus interiores sino que también incluirá su imagen exterior. Noviembre suele ser el mes por excelencia para que este tipo de barcos entren en dique seco a realizar alguna mejora; con la temporada de cruceros por Europa ya finalizada los trabajos se llevan a cabo justo antes de que  comience la temporada de cruceros en el Caribe. Tampoco es raro que un navío como el Aurora, con14 años de vida a sus espaldas, pase por «quirófano» para sufrir un proceso de revitalización;  está claro que la máxima «renovarse o morir» también tiene validez en un sector tan competitivo como el de los cruceros.


El Aurora con Seixo Branco de fondo.

El inicio de los trabajos está previsto para este 29 de noviembre cuando el Aurora, tras desembarcar al pasaje de este crucero de nuevo en Southampton, se dirija a los astilleros Blohm + Voss de Hamburgo donde ese mismo día comenzará una agenda contrarreloj para llevar a cabo todas las actuaciones previstas en un tiempo récord de 20 días. Además de los habituales trabajos de mantenimiento en la maquinaria y el casco de la nave casi todas las estancias a bordo del Aurora sufrirán importantes cambios centrándose sobre todo en las opciones de restauración; así el buque incorporará nuevas instalaciones como el Sindhu Restaurant, especializado en comida fusión india de la mano del chef Atul Kochhar, galardonado con una estrella Michelín. También será nuevo el Glass House Restaurant que contará con una gran selección de vinos y que sustituirá al Cafe Bordeaux. La inclusión de estos dos nuevos restaurantes, ya presentes en los buques Azura y Ventura, tiene como objetivo homogeneizar un poco más la flota P&O en lo referente a su oferta de cara al público. La reforma integral de los interiores del Aurora también incluirá otros espacios como el Oasis Spa, el teatro, el Reef Children´s Club, el casino, la zona de tiendas y la galería fotográfica. En total el coste de los trabajos se estima en unos 32´8 millones de euros.

Claro que pese a que los cambios en los interiores del Aurora serán muy notables todo queda eclipsado por la radical metamorfosis que sufrirá en su imagen exterior y es que aprovechando la entrada del buque en dique seco se acometerá el ya anunciado cambio de colores corporativos de la compañía siendo el Aurora el primer buque de la flota en lucir la nueva y polémica imagen de la P&O consistente en una gran «Union Jack» pintada en la proa y la sustitución del color de la chimenea del tradicional beige al azul. Tras el Aurora  el resto de buques de la naviera irán adquiriendo progresivamente este nuevo «look» si bien aún no se ha confirmado las fechas exactas en la que lo harán.

Aunque sea virtual, esta imagen nos vale para hacernos una idea de la nueva estampa que lucirá el Aurora dentro de un mes.
(Fuente: cruisemiss.com)

 Tras la conclusión de la reforma, el Aurora concluirá su visita a los astilleros alemanes y dejará Hamburgo el día 18de diciembre para dirigirse a Southampton desde donde zarpará en su última singladura del año, el ya tradicional crucero de Navidad y año nuevo de 14 noches de duración que se iniciará el día 21 y que le traerá, de cumplirse las previsiones, dos jornadas después a A Coruña donde podremos ver casi en primicia la nueva imagen que lucirá a partir de entonces el Aurora. Una estupenda oportunidad para comparar entre la antigua y la nueva imagen imagen con tan sólo un mes de diferencia entre ambas. A mí ya me tarda en llegar el día…

El mar de fondo coruñés ofreciendo siempre un maravilloso espectáculo.

Pero para que ésto ocurra habrá que esperar todavía un mes; de momento nos quedamos con su última visita, la del pasado jueves, que finalizó a primera hora de la tarde cuando el Aurora soltó amarras para poner rumbo a Casablanca. El sempiterno mar de fondo coruñés contribuyó a hacer más vistosa si cabe la última salida de la ciudad de este ya emblemático buque, la última con su tradicional traje, se entiende, puesto que a partir del día 23 habrá un antes y un después en sus visitas a la ría coruñesa.

(Foto: Manuel Candal)

Para acabar quisiera agradecer una vez más a mi amigo Manuel Candal las extraordinarias fotos prestadas para ilustrar este post.

Mi amigo Jose «afotando» al Aurora durante su salida de la ciudad el pasado jueves.