El puerto de A Coruña alcanzó este viernes un nuevo hito en su historia con la escala inaugural del megacrucero AidaCosma, que se convierte en el segundo navío de pasaje más grande de su historia en atracar en sus instalaciones.
Además de ser uno de sus visitantes de mayor tamaño, la presencia del AidaCosma en A Coruña pasará a la historia por otros muchos motivos. Se trata del cuarto buque de pasaje que hace escala en el puerto gallego de los catalogados como «nueva generación»; aquellos que usan como combustible el Gas Natural Licuado (GNL). El primer buque de estas características en visitar A Coruña fue el AidaPrima, a finales de 2017, si bien hay que aclarar que el Prima es un híbrido que utiliza GNL y diesel para propulsarse. El AidaCosma sin embargo puede moverse exclusivamente con este combustible verde.
A Coruña también puede presumir de ser el primer puerto español en recibir al AidaCosma. No hace ni una semana que el buque fue bautizado en una fastuosa ceremonia celebrada en el puerto de Hamburgo y que pudieron ver miles de personas en directo o a través del canal de Youtube de la naviera.
Los números del AidaCosma
Construcción Nº 709 de los astilleros alemanes Meyer, situados en la ciudad de Papenburg, los números del AidaCosma hacen palidecer a la mayoría de barcos de su misma tipología. Se trata de un buque de 183.774 T.R.B. y 16.450 T.P.M. cuyas dimensiones principales alcanzan los 337 metros de eslora, 42 metros de manga y 8´ 6 metros de calado. Su altura desde la línea de flotación roza los 70 metros. Con esta cifras en la mano, el AidaCosma es el décimo crucero más grande del mundo actualmente en servicio.
Puede albergar a 5.252 cruceristas en doble ocupación gracias a sus 2.626 camarotes pero la cifra alcanza los 6.654 pasajeros si la nave viaja con el aforo al completo. Esta capacidad sólo la superan en la industria crucerística actual los buques de la clase Oasis de Royal Caribbean.
Con un total de 19 cubiertas, el equipamiento a bordo del AidaCosma es completísimo. Cuenta con 17 opciones de restauración, cine, parque acuático, una novedosa «escape room», uno de los mayores spas que existen hoy en día en alta mar, con más de 3.500 m2 y un total de 6 piscinas, una de ellas con techo retráctil. Y eso sólo por citar sus instalaciones más destacadas.
El buque más verde de la industria crucerística
El AidaCosma es la unidad gemela del AidaNova, que hace unos meses también se dejó ver por los muelles coruñeses. Ambos buques pertenecen a la Helios-Klasse, una subdivisión dentro de la Excellence-Class. Los buques de la Clase Excellence son los navíos de nueva generación del gigante crucerístico Carnival. Forman parte de esta familia además de los dos buques de Aida mencionados el Costa Smeralda (2019) y Costa Toscana (2022) de Costa Cruceros, el Iona (2020) de P&O y el Mardi Gras (2020) de Carnival. Todos ellos se caracterizan por ser los primeros navíos de su tipología que pueden operar exclusivamente con Gas Natural Licuado (GNL).
Pese a su naturaleza fósil, el gas natural licuado es considerado un combustible limpio ya que no genera emisiones de azufre ni de partículas de hollín y las de óxidos de nitrógeno y CO2 se reducen en un 90% y un 40% respectivamente. De esta manera los barcos de la Excellence-Class han supuesto un importante salto cuantitativo en materia medioambiental para la industria crucerística.
Así en el AidaCosma, la tradicional propulsión diesel-eléctrica que suelen equipar este tipo de unidades elimina el diesel de la ecuación al sustituirlo por GNL gracias a que los 4 motores Caterpillar-MaK 16VM46DF del buque pueden arrancar directamente con gas natural licuado.
Dos grandes depósitos criogénicos en las entrañas del barco
El Cosma almacena el GNL en dos grandes depósitos cilíndricos situados en la base de la nave que pueden contener hasta 3.600 m3 de combustible. Se trata, eso sí, de unos contenedores con unas características muy especiales. El Gas Natural Licuado presenta la particularidad de que en estado líquido ocupa un volumen 600 veces inferior que en estado gaseoso, razón por la cual para que sea factible su almacenaje deba permanecer en estado líquido en todo momento. El problema es que la temperatura de licuefacción del GNL (temperatura necesaria para que pase de estado gaseoso a estado líquido) es de -164 ºC, lo que obliga a su almacenaje en depósitos criogénicos.
Los dos depósitos de GNL del AidaCosma pueden trabajar a temperaturas de hasta – 196 ºC por lo que su estructura está debidamente reforzada. Sus paredes de acero alcanzan espesores de 8 cm y presentan gruesas capas de aislamiento para evitar los intercambios de temperatura entre el interior y el exterior del tanque.
Despedida por todo lo alto
Para despedir al megacrucero alemán como merecía la ocasión, los coruñeses acudieron en masa a las inmediaciones del puerto y a los principales miradores de la costa para darle al AidaCosma un cálido adiós. Al extraordinario ambiente existente en la zona del Parrote contribuyó sin duda la soleada jornada y la festividad de Viernes Santo, que convirtieron la maniobra de salida del buque en una de las más multitudinarias que se recuerdan en la urbe. Puntual como un reloj, a las ocho de la tarde el AidaCosma iniciaba lentamente la marcha y tras revirarse a la altura del Castillo de San Antón ponía proa hacia el sur rumbo a la ciudad de Lisboa.
El frenético ritmo de escalas en el puerto de A Coruña continuará este fin de semana con la presencia de tres nuevos buques de pasaje.
Foto portada: Diego Veiga
