Así como quien no quiere la cosa se nos ha ido la mitad del 2019, y a decir verdad en términos crucerísticos este primer semestre del año no ha estado nada mal para el puerto coruñés: nada menos que 51 escalas (más 2 por evacuación médica del Oriana). Y para ponerle la guinda al pastel el encargado de cerrar el frenesí «cruceril» de estos 6 meses fue el lujoso SeaDream I, inédito hasta la fecha en la rada herculina y que hacía su escala inaugural en la ciudad el pasado domingo.
 Nuevo estreno en la dársena herculina a cargo del SeaDream I.
Para ser un debut hay que decir que la llegada del SeaDream I levantó poca expectación (más bien ninguna). Ni la temprana hora ni el minúsculo tamaño del protagonista ayudaban. Tampoco una climatología que sin ser pésima no mostraba indicio alguno del verano en el que supuestamente nos encontramos. Procedente de Vigo, el SeaDream I hizo su primera entrada en la dársena coruñesa sobre las siete y media de la mañana. A bordo del buque, propiedad de la naviera SeaDream Yacht Club, llegaron un puñado de acaudalados pasajeros. Lo del «puñado» no es una expresión elegida al azar; a bordo del buque viajan exactamente 105 turistas. Si os digo que para atender a este poco más de centenar de afortunados la tripulación llega a las 82 personas ya podemos olvidarnos de que estamos ante un buque corriente y moliente.
Calificar de lujoso al SeaDream I es quedarse muuuuy corto.

La ruta que estos días efectúa este ultralujoso navío de bandera bahameña es una travesía de 9 noches de duración con partida desde Lisboa y que finalizará en Burdeos el próximo sábado, no sin antes haber hecho escala en Leixoes, Vigo, A Coruña, Gijón, Santander, Bilbao y Pasajes. De los precios para esta singladura mejor ni hablamos (de 7.000 euros por persona hacia arriba).
El SeaDream I durante su salida de A Coruña el pasado domingo compartiendo plano con el bellísimo yol Challenger 93.

 Como comenté al principio el del SeaDream I es el cuarto debut de una nave de cruceros en A Coruña en esta temporada tras los del Mein Schiff 2 en febrero, el del Le Champlain a finales de abril y el del espectacular Celebrity Edge a mediados de mayo. A diferencia de éstos, que son auténticas primicias en el sector con apenas unos meses de vida (o incluso menos), nuestro protagonista de hoy lleva más de tres décadas pateándose los mares. Pasaremos por alto el feo que supone el que en todo este tiempo no haya encontrado un hueco para hacernos aunque fuera una breve visita.
Para hablar de los inicios de nuestro protagonista de hoy hay que echar la vista atrás hasta la década de los 80 del pasado siglo, concretamente a 1984, año en el que esta diosa del mar vio la luz en los astilleros Wärtsilä de la ciudad finlandesa de Helsinki. Lo de «diosa del mar» no es gratuíto sino que ese fue el nombre con el que fue bautizado: Sea Goddess I, una diosa cuya génesis y posterior explotación constituyen una de las historias más rocambolescas de la reciente historia de la industria crucerística y que os contaré con más detalle dentro de unos días, cuando el buque protagonista del post de hoy regrese a la ciudad. Hoy sólo os diré que se trata de un navío de 4.333 toneladas de registro bruto y 450 de peso muerto, que cuenta con unas dimensiones principales de 108 metros de eslora, 14 metros de manga y un calado de 7´2 metros. En sus 3 cubiertas de pasaje encuentran acomodo un total de 112 pasajeros en alguno de sus 56 alojamientos. Sus 95 tripulantes otorgan a esta nave uno de los ratios de pasajero por tripulante más acojonantes asombrosos de toda la industria; practicamente 1:1, cifras más propias de un yate privado que de un crucero al uso.
Luciendo a popa una «conveniente» bandera de Bahamas.
Este aspecto, el de que el buque se identifique más con el mundo de los yates que con el de los cruceros, es una característica en la que hace especial hincapié su naviera, que por algo se hace llamar SeaDream Yacht Club, y no SeaDream Cruises. Fundada en el año 2002 por Larry Pimentel, actual CEO de Azamara Cruises, y el noruego Atle Brynestad, el fundador de Seabourn, desde sus inicios la compañía se jacta de ofrecer a bordo todo lo que el pasajero desee, un cliente tipo que suele ser mayoritariamente americano aunque cada vez se embarcan más europeos y cuya edad parte de los 40 hacia arriba. lo del alto poder adqusitivo se da por entendido. El pequeño tamaño de sus buques hace que en ocasiones sean operados en régimen de chárter privado.
Como un yate, o casi.
Su flota la conforma además del barco que podéis ver en estas fotos, su gemelo, que atiende al original nombre de SeaDream II. Pese a que ambos buques superan de largo la tres décadas de vida marinera lucen estupendos merced a varias reformas, la última de las cuales data del 2016. Pero como la competencia aprieta, SeaDream ya se ha puesto manos a la obra para revitalizar su flota; hace unas semanas la naviera anunciaba los planes para la construcción de su nuevo buque insignia, que llevará por nombre SeaDream Innovation y que si todo va bien, verá la luz en otoño del 2021. El nuevo navío de la compañía doblará en tamaño y capacidad a los actuales, si bien mantendrá los ratios de pasajeros que caracterizan a la marca. La buena noticia para los shipspotters coruñeses es que la naviera ya ha confirmadoque el SeaDream Innovation visitará nuestra ciudad: será el 22 de septiembre de 2021, pocos días después de su inauguración oficial.
Arriba: La escala del SeaDream I del pasado domingo supone además el estreno de la naviera SeaDream Yacht Club en A Coruña.
Abajo: En 2021 la compañía noruega presentará su nuevo buque, el SeaDream Innovation.
(Foto abajo: SeaDream Yacht Club)
 Volviendo al pasado domingo, el SeaDream I dio por concluída su visita inaugural al puerto herculino a las séis de la tarde cuando el pequeño buque se hizo de nuevo a la mar poniendo rumbo a Gijón. El próximo día 12 el lujoso navío regresará a aguas de Marineda. Ya se sabe que el que visita A Coruña, repite.
Rumbo a Gijón.
Las fotos de esta entrada han sido
realizadas por Diego Veiga. Por favor, respetad la autoría de todas
ellas.