(Foto: Manuel Candal)
Todo un veterano de los mares como el Aegean Odyssey ha sido el encargado de cerrar la nómina de visitas crucerísticas de agosto, que llega a su fín con unas excelentes cifras gracias a sus 10 atraques. En unos días comenzará el frenético septiembre, que en materia de cruceros es junto mayo el mes de referencia en esta materia pero antes de adentranos en la vorágine de septiembre conozcamos algo más sobre la escala realziada por nuestro protagonista de hoy.
El Aegean Odyssey cerró hoy  el agosto crucerístico en A Coruña.
(Foto: J.R. Montero)
Su llegada estaba prevista para primera hora de hoy pero el Aegean Odyssey es un enamorado de nuestra ciudad; ya lo demostró el año pasado en una escala realizada también por estas fechas, cuando la nave adelantó su llegada unas diez horas para que su selecto pasaje pudiera pernoctar en A Coruña. Este año repitió la jugada. Minutos antes de las tres de la tarde de ayer y 15 horas antes de lo que tenía programado, el Odyssey hacía su entrada en el puerto herculino procedente de la dársena de Pasaia con poco más de 300 pasajeros a bordo que de esta manera tuvieron un tiempo extra para concocer mejor la urbe que se abría a su pies. La de esta semana es la tercera visita a la ciudad del Aegean Odyssey tras su debut en julio de 2016.
El Aegean Odyssey abandonando la localidad de Pasaia para poner rumbo a nuestra ciudad.
(Foto: V. Aguete)
Su puerto de procedencia, Pasaia, la localidad vasca situada en la desembocadura del río Oyarzun, ya indica que el Aegean Odyssey no es un barco de cruceros como los demás. Su naviera, la británica Voyages to Antiquity, oferta con su único buque itinerarios con escalas en lugares poco habituales dentro del circuito crucerístico habitual, en muchos casos por estar su acceso restringido a los enormes megacruceros, lo que ofrece un plus de exclusividad a sus rutas. Las travesías también presentan una mayor duración que las ofertadas por otras compañías y rara vez sus singladuras bajan de las dos semanas. La que ayer trajo al buque hasta nuestros muelles tiene una duración de 27 noches y comenzó el pasado día 20 en la terminal de Tilbury, el considerado puerto de Londres. Desde allí el pasaje del Aegean Odyssey, formado mayoritariamente en esta ocasión por británicos y australianos, ha podido disfrutar de las escalas en Rouen, Honfleur, Nantes, y Burdeos antes de vistar tierras vascas y gallegas. Por delante quedan las recaladas en Leixoes, Lisboa, Cádiz, Málaga, Valencia, Barcelona, Port-la-Nouvelle, Marsella, Mónaco, Portofino y Livorno antes de concluír la ruta en «la ciudad eterna», Roma, el próximo 13 de septiembre; casi un mes de crucero en el que las tarifas partían desde los 5.000 euros.
El Aegean Odyssey durante su llegada ayer a nuestra ciudad, con Seixo Branco al fondo.
(Foto: J.R. Montero)
Construído como buque de carga rodada en 1973 en los astilleros Santierul Naval de la ciudad rumana de Galati, el actual Aegean Odyssey es un buque de 12.094 toneladas de
registro bruto que tiene unas  dimensiones principales de
140´5 metros de eslora, 20´4 metros de manga y un calado de 6´1 metros. En sus 7 cubiertas de pasaje puede acomodar a 386 pasajeros en ocupación
normal gracias a sus 216 camarotes, de los cuales tan sólo 42 tienen
terraza privada. Destaca como característica inusual que 26 camarotes están
destinados para aquellos que viajan solos.
(Foto: J. Daniel Díaz)
Tras una larguísima escala que se prolongó por espacio de 27 horas finalmente el Aegean Odyssey abandonaba los muelles herculinos a las seis de esta tarde rumbo a su siguiente destino, la dársena de Leixoes. El 24 de agosto del próximo año este veterano navío ya tiene confirmada su presencia nuevamente en la ciudad. Por algo es todo un enamorado de A Coruña.



El Aegean Odyssey repetirá visita en 2019
(Foto: J. R. Montero)





Agradecimientos a Manuel Candal, J.Daniel Díaz y Jose R. Montero, autores de las fotos que ilustran el post de hoy.