Los buques Crystal Serenity y Crystal Symphony han sido vendidos mediante un proceso de subasta.

Los dos buques pertenecían a la naviera Crystal Cruises, que a principios de este año se declaró en quiebra, cesando su actividad tras tres décadas. Todos los activos de la compañía se han puesto a la venta desde entonces, incluida su flota de buques oceánicos y de expedición.

Según diversas fuentes del sector, la venta de ambos buques ha alcanzado los 128 millones de dólares siendo los compradores de los navíos la empresa CSE Ltd. en el caso del Serenity y CSY Ltd. en el caso del Symphony. Se desconoce la identidad de quien se esconde tras estas siglas. Los compradores fueron los que presentaron la mejor oferta, además del depósito del 10 % exigido en el pliego de condiciones.

Un futuro dispar para ambos barcos

El futuro del Crystal Serenity parece más o menos asegurado. Su precio de venta, 103 millones de dólares, unidos a la edad del navío, botado en 2002, parecen indicar que el buque continuará navegando a medio plazo bajo los colores de otra marca, que podrá contar con un buque relativamente moderno y que gozaba de un gran prestigio en el sector.

Suerte dispar parece que va a correr su compañero de flota, el Crystal Symphony. Botado en 1995 el buque ha sido adquirido por tan sólo 25 millones de dólares, un auténtico chollo que podría apuntar a un inminente final en forma de desguace.

Ambos buques se encuentran atracados actualmente en Freeport (Bahamas) desde que a principios de año Crystal Cruises suspendiera operaciones y se emitiera una orden de detención para sus barcos debido a la reclamación de facturas impagadas por parte de varios acreedores.

Foto portada: Diego Veiga