Este jueves ha tenido lugar la escala del buque Vasco Da Gama en el puerto de A Coruña, en lo que supone su estreno en la dársena herculina.

Procedente de Honfleur (Francia) el buque de la naviera Nicko Cruises llegó pasada la medianoche, una hora un tanto atípica para una nave de cruceros. El motivo de atracar en plena noche fue que el crucero adelantó su hora de llegada, prevista para las siete de la mañana debido al mal tiempo. A bordo del navío de bandera portuguesa viajan un millar de pasajeros que disfrutan de un viaje desde el norte de Europa y que finalizará el próximo sábado en Lisboa.

El buque Vasco Da Gama hizo su estreno este jueves en el puerto herculino. (Foto: Diego Veiga)
El buque Vasco Da Gama hizo su estreno este jueves en el puerto herculino. (Foto: Diego Veiga)

A diferencia de los últimos buques de pasaje que nos han visitado, a la vista está que el Vasco Da Gama no es ningún gigante de los mares. Estamos ante un barco de 55.877 T.R.B. y 7.637 T.P.M. cuyas medidas principales alcanzan los 219´ 2 metros de eslora, 30´ 8 metros de manga y 7´ 7 de calado. La altura hasta el tope de la chimenea alcanza los 40 metros. Con 10 cubiertas dedicadas en exclusiva al pasaje el Vasco Da Gama puede albergar a 1.258 pasajeros en régimen de doble acomodación. La tripulación la componen 557 personas.

A nivel mecánico el Vasco Da Gama cuenta con 5 motores diesel Sulzer que producen un total de 34.560 KW. 2 hélices de paso variable son las encargadas de propulsar el conjunto hasta los 22 nudos de velocidad máxima.

Vasco Da Gama
(Foto: Diego Veiga)

Un histórico de la industria de la década de los 90

Pese a tratarse de un debut, el Vasco Da Gama no es ningún recién llegado al sector de cruceros sino que cuenta ya con una longeva carrera de casi 30 años.

Construcción nº5881 de los astilleros Fincantieri, en su sede de Monfalcone, el actual Vasco Da Gama entró en servicio en enero de 1993. Fue un encargo realizado por la naviera Holland America Line (HAL) , que tan sólo unos años antes había sido adquirida por el grupo Carnival. Para modernizar su flota, Carnival decidió construir para HAL tres buques idénticos de nueva generación que serían conocidos con el nombre genérico de S-Class. La «S» hace mención al primer buque de la serie, el Statendam, nuestro protagonista de hoy en el blog.

Los encargados del proyecto tomaron como base el diseño del Costa Classica, del que calca su forma exterior y medidas. Otra característica destacada de su diseño fueron sus alas del puente cubiertas. Puede parecer algo totalmente normal en la actualidad pero que no lo era a mediados de los 90. De hecho el Statendam fue el primer buque de Holland en incorporar esta característica.

Tras 22 años al servicio de Holland America Line, los buques de la S-Class comenzaron a quedarse atrás respecto a la competencia y Carnival decidió transferir el Statendam a otra de sus marcas, en este caso P&O Australia. En las antípodas el buque comenzó una nueva etapa comercial rebautizado como Pacific Eden.

La aventura «aussie» fue más breve de lo esperado; una nueva reestructuración de la flota provocó la venta del Pacific Eden y de su gemelo, el Pacific Aria en 2018. La naviera británica Cruise & Maritime Voyages (CMV) adquirió el buque, rebautizando al Pacific Eden con el nombre de Vasco Da Gama. El nombre del navegante portugués fue elegido entre un listado donde se encontraban otros ilustres exploradores como Henry Hudson o Amerigo Vespucci. Tras una reforma en Singapur, el buque entró en servicio con sus nuevos colores en junio de 2019.

Vasco Da Gama
(Foto: Diego Veiga)

Cambio de rumbo por culpa de la pandemia

La llegada de la pandemia sin embargo desbarató su prometedora carrera en la naviera CMV. La compañía británica fue una de las principales perjudicadas debido a la profunda crisis del sector crucerístico como consecuencia del obligado parón en la operaciones, y quebró en julio de 2020. Su flota fue puesta a la venta mediante subasta pero la elevada edad de los navíos provocó que sólo se interesaran por ellos las empresas dedicadas al desguace. El único que se salvó de la quema fue el relativamente moderno Vasco Da Gama, que fue adquirido por 10´ 1 millones de dólares por el grupo inversor portugués Mystic Cruises.

El Vasco Da Gama opera para la marca germana Nicko Cruises. (Foto: Diego Veiga)
El Vasco Da Gama opera para la marca germana Nicko Cruises. (Foto: Diego Veiga)

Tras la adquisición el Vasco Da Gama navegó hasta el país vecino, donde se sometió a un profundo proceso de renovación en los astilleros Lisnave de Setúbal. Los trabajos incluyeron además de una actualización de los alojamientos y espacios comunes, diversas mejoras en el apartado mecánico. La principal fue la instalación de cinco sistemas de reducción catalítica selectiva (SCR) para reducir las emisiones contaminantes por debajo del nivel Tier III. Esto le permite ahora al buque navegar por áreas sensibles como los fiordos noruegos y el Báltico. La reforma también incluyó la adición de un sistema de tratamiento de aguas residuales de última generación.

Pese a pertenecer a interses lusos, el Vasco Da Gama opera para la marca Nicko Cruises, dedicada en exclusiva al mercado alemán y que ofrece cruceros por el norte de Europa, Canarias y el Mediterráneo.

A las 17:00 horas el Vasco Da Gama puso fin a su primera estancia en A Coruña y zarpó poniendo rumbo al puerto de Leixoes.

Vasco Da Gama
Rumbo a Leixoes. (Foto: Diego Veiga)

Foto portada: Diego Veiga